Perro de color claro saltando en una imagen y acostado en la paja rodeado de cerditos en la otra

El Golden Retriever que se ha hecho amigo de unos cerdos

Tumbado en el suelo se deja acariciar por sus nuevos amigos

Un vínculo inesperado entre especies causa ternura en redes sociales. Un perro de raza Golden Retriever protagoniza entrañables escenas junto a varios lechones, compartiendo juegos y afecto. Bajo la luz de internet, su complicidad ofrece una mirada sincera sobre la empatía animal.

Lo que se ve en el vídeo

En un entorno rural o de feria —como reflejan las vallas de paja— aparece un perro joven de raza Golden Retriever interactuando con varios cerditos. Juegan juntos, se olisquean y se acarician sin tensión, mostrando una actitud tranquila y receptiva hacia ellos. La naturalidad del momento fue captada en vídeo y rápidamente tuvo repercusión en plataformas como TikTok y Facebook.

Reacciones en redes y comportamiento real

Compañías como LADbible o cuentas como r.krueger10 subieron videos similares, usados etiquetas como #showpigs, #goldenretriever y #pigsoftiktok. En algunos de ellos se nombra a “Winston” el perro, quien “vive en una granja de cerdos y ayuda a criar a los lechones”.

Dos perros en la orilla de un cuerpo de agua, uno de ellos se acerca a una pelota flotante mientras el otro lo observa desde la orilla.
Perros bañándose juntos | Instagram

Este tipo de empatía no sorprende a expertos en comportamiento animal. Los Golden Retrievers son conocidos por su sociabilidad con otros animales e incluso por emitir sonidos guturales suaves cuando interactúan, que algunos dueños describen como “parecidos a los de un cerdo”. En Good Morning America incluso compartieron otro vídeo donde un Golden convive de forma afectuosa con una camada completa de cerditos.

Contexto de la conducta animal

El Golden Retriever es una raza tradicionalmente dedicada a la cooperación. Históricamente fueron criados para ayudar a recuperadores de aves en cacería, fomentando predisposición al contacto físico y la cooperación. Esta predisposición facilita amistades inter-especies, siempre que se den condiciones de socialización temprana y sin estrés.

En contextos rurales, perros conviven con otras especies como gallinas, caballos o cerdos desde cachorros, reforzando pautas asociadas a cuidados compartidos. Estos vínculos se reflejan en la confianza mutua, movimientos sincronizados, incluso señales reconfortantes como lamerse o quedarse calmados hombro con hombro.

Capturas de un vídeo de Instagram
Golden Retriever bebiendo agua de un grifo | Instagram

La acogida de la comunidad animalista

Desde la vivencia compartida en ambientes rurales, donde perros y cerdos crecen juntos, surgen amistades profundas gracias a la convivencia desde cachorros. Esa proximidad forma la base de una confianza mutua, reflejada en movimientos sincronizados, lamidos relajantes e incluso en el simple hecho de quedarse apoyados hombro con hombro. Detrás de estos gestos se esconden patrones de comportamiento analizados por la comunidad científica.

Un estudio comparativo entre perros y cerdos reveló que ambos detectan emociones humanas, pero los canes responden con mayor intensidad ante llantos, mostrando vocalizaciones y signos de estrés que evidencian un contagio emocional superior. Este hallazgo conecta directamente con el comportamiento observado en campo, donde no solo hay contacto físico sino una auténtica resonancia afectiva.

Golden Retriever, una raza sensible

Investigaciones genéticas han sugerido que los Golden Retrievers presentan variaciones en el receptor de oxitocina —la llamada “hormona del vínculo”— que los predisponen a mostrarse especialmente sensibles y colaboradores. Es decir, no se trata solo de crianza compartida, sino de un diseño evolutivo que favorece esa conexión entre especies.

El vínculo entre este Golden Retriever y los cerdos nos recuerda que el afecto puede cruzar las barreras de especie. La historia apunta a la importancia de una crianza respetuosa, donde la socialización temprana permite amistades profundas incluso con animales que tienen conductas muy distintas. Además, refuerza la idea de que los perros —y especialmente los Golden Retrievers— son una raza versátil, capaz de adaptarse a diversos entornos y compañeros de vida.