Un perro con un antifaz rosa está sentado frente a un plato con comida, y en la segunda imagen aparece con el texto "Cheater!!!".

Un Golden Retriever se indigna cuando le cambian el pollo por brócoli

Atentos a la indignación del animal

No es ningún secreto que los perros pueden ser criaturas de hábitos —y también de gustos muy definidos. Y si hay algo que suele despertar unanimidad en el reino perruno, es el pollo. Jugoso, sabroso, aromático… difícil resistirse, ya sea humano o mascota. Pero esta semana, un vídeo protagonizado por un Golden Retriever ha reventado las redes sociales precisamente por todo lo contrario: por una sorpresa alimentaria que no le hizo ninguna gracia al protagonista.

El clip, que acumula ya millones de visualizaciones en Twitter y otras plataformas, muestra un momento tan sencillo como genialmente planificado por sus humanos: el perro aparece sentado con mucha calma mientras le colocan cuidadosamente un pañuelo de cocina sobre los ojos, como si se tratara de una especie de vendaje improvisado. Todo apunta a que va a participar en un “experimento” culinario.

Un perro con un disfraz de vaca posa en un jardín con flores amarillas.
El perro-vaca que se ha hecho viral en X | Twitter

El aroma del engaño: un plan perfecto… ¿o no?

Con el perro tapado, su humano acerca lo que, según parece por su olfato, es un suculento trozo de pollo. El animal comienza a mover la cola y sus orejas se activan como pequeños radares. Lo huele. Lo identifica. Y su entusiasmo aumenta. Su lenguaje corporal lo deja claro: sabe que está a punto de recibir su premio favorito.

Pero lo que no sabe es que todo forma parte de una farsa. La ilusión dura apenas unos segundos. En cuanto le retiran el pañuelo y descubre la cruda verdad —un brócoli en lugar del ansiado pollo— su expresión cambia por completo. El enfado, inmediato y cómico, no se hace esperar.

Pero cuando le retiran el pañuelo… llega la decepción.

En lugar de encontrarse con el esperado trozo de carne, lo que tiene delante es un florete de brócoli. Verde, fibroso, vegetal. El rostro del perro lo dice todo. Se queda unos segundos paralizado, procesando la traición, y después… comienza una serie de reacciones que han hecho reír (y enternecer) a miles de usuarios: primero aparta el brócoli con el hocico, luego mira a su humano con una mezcla de indignación y confusión, y finalmente se aleja lentamente, como si necesitara espacio para digerir lo que acaba de ocurrir. Literal y emocionalmente.

Un perro está sentado en una silla frente a una mesa, donde hay una piedra y unas tijeras, y parece estar interesado en lo que está sobre la mesa.
Perro astuto sabe jugar al piedra papel tijera | X / Twitter, XCatalunya

La humanidad en una mirada perruna

Lo que ha hecho que este vídeo se vuelva viral no es solo lo bien montado del experimento ni la ternura del protagonista, sino lo humanamente expresiva que resulta su reacción. “A mí también me han hecho eso con las croquetas”, comentaba un usuario entre risas. “Este perro entendió el verdadero significado de la traición”, añadía otro.

No es la primera vez que un perro protagoniza un vídeo viral por sus reacciones, pero este caso ha tocado una fibra distinta: la de la expectativa rota, algo con lo que cualquiera puede identificarse, más allá de especies. Y aunque el brócoli no es tóxico para los perros y de hecho puede formar parte ocasional de su dieta, está claro que cuando se espera pollo… todo lo demás sabe a decepción.

¿Moraleja? Si tienes un Golden Retriever, no le prometas pollo si vas a servirle brócoli. Porque aunque lo perdone… nunca lo olvidará.