Los datos del IPC publicados este jueves confirman que las pensiones contributivas se revalorizarán un 3,8% el próximo año, según el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. El incremento, que se hará efectivo a partir del 1 de enero, es el resultado del IPC medio entre diciembre de 2022 y noviembre de 2023, de acuerdo con la fórmula incluida en la Ley 20/2021 de garantía del poder adquisitivo de las pensiones y acordada con los agentes sociales. Con esta subida, el aumento pensión media de jubilación en el Estado será de 734 euros al año y el importe medio del sistema se situará en los 1.200 euros, 638 euros más al año. Según el gobierno español, más de 10 millones de pensionistas verán cómo se mantiene o aumenta su prestación.
La evolución de las pensiones en España en los últimos años se ha caracterizado por un incremento en la cantidad de pensionistas y en la cuantía de las pensiones. Actualmente, hay alrededor de 9,15 millones de pensionistas, distribuidos de manera bastante equitativa entre hombres y mujeres. La pensión media ha mostrado un crecimiento constante, siendo más notable en el caso de las pensiones de jubilación. Una particularidad importante de este aumento es que las pensiones han experimentado una revalorización anual que se ajusta a los cambios en el Índice de Precios al Consumo (IPC). Para el año 2024, se prevé un incremento de las pensiones contributivas en línea con la inflación, lo que supone una subida significativa.
Al comparar la evolución de las pensiones con los salarios, se observa que las pensiones han aumentado a un ritmo más acelerado. Este fenómeno se debe en parte a factores económicos y demográficos, como el aumento del paro y la baja inflación, que han contribuido a la contención salarial. Las nuevas pensiones de jubilación suelen ser más altas y están vinculadas a la inflación, lo que significa que se ajustan anualmente en función de la inflación media del año anterior.
El problema a largo plazo de las pensiones en España
Sin embargo, el sistema de pensiones español enfrenta desafíos importantes. El aumento de la esperanza de vida, el descenso de la natalidad y la próxima jubilación de la generación del baby boom son factores que incrementarán el gasto en pensiones. Actualmente, este gasto representa una parte importante del PIB, y más del 72% de la nómina total de pensiones se destina a las de jubilación. Las pensiones en España son consideradas generosas en relación con los salarios, lo que plantea un desafío para alcanzar un equilibrio intergeneracional y garantizar la sostenibilidad del sistema a largo plazo.