El café es una bebida que forma parte de la rutina diaria de muchas personas. Su aroma y sabor lo han convertido en un acompañante ideal, especialmente después de las comidas. Esta costumbre de tomar café tras el almuerzo está tan arraigada que resulta casi un ritual. Sin embargo, los expertos en salud han advertido que aunque el café después de la comida tiene beneficios, también puede tener efectos negativos.
Beber café tras la comida puede ser beneficioso para la digestión. Esta bebida ayuda a activar el sistema digestivo, favoreciendo el tránsito intestinal y combatiendo el estreñimiento. Por eso, muchas personas sienten que el café les ayuda a aliviar la pesadez después de una comida copiosa. Además, el café tiene propiedades antioxidantes que son beneficiosas para el organismo.
Sin embargo, los especialistas en nutrición señalan que el café también puede interferir con la absorción de ciertos nutrientes. En particular, cuando se consumen alimentos ricos en hierro o calcio, el café puede dificultar la digestión de estos minerales. El hierro es fundamental para prevenir la anemia y mejorar los niveles de energía, mientras que el calcio es esencial para la salud de los huesos. Por ello, los expertos recomiendan esperar al menos una hora después de comer antes de tomar café, si se han consumido alimentos ricos en estos nutrientes.
Más perjuicios del café
Otro aspecto a considerar es el efecto estimulante del café. Tomar café después de una comida puede hacer que la sensación de somnolencia disminuya, lo cual puede ser útil si se necesita continuar con actividades productivas durante la tarde. No obstante, para quienes desean tomar una siesta, el café puede dificultar el descanso. Los expertos sugieren optar por un café descafeinado si el objetivo es disfrutar de un momento relajante sin interferir con el sueño.
Además, algunos expertos destacan que el café puede aumentar la acidez estomacal. Consumirlo después de una comida abundante puede irritar el estómago, especialmente en personas sensibles a los ácidos. Esto puede provocar molestias digestivas, como ardor o reflujo, lo cual puede empeorar si se toma café en grandes cantidades o con ingredientes como leche o azúcar.
Beber café solo, sin azúcar ni lácteos, es la forma más recomendada por los expertos. Añadir azúcar, leche o crema puede aumentar la ingesta de calorías innecesarias y afectar los niveles de glucosa en sangre. También se desaconseja añadir alcohol al café después de la comida, ya que puede ser perjudicial para la salud a largo plazo y no aporta beneficios significativos para la digestión.