Verano es época de playas y te explicamos cómo llegar a algunas de las mejores de la Costa Brava. El plan funciona mejor con base en Girona, Palafrugell o Cadaqués, según tu objetivo. Desde Barcelona hay conexiones diarias hacia la Costa Brava con operadores interurbanos, y en verano se refuerzan los enlaces locales hacia playa. En Palafrugell, el Bus 30 une Palafrugell–Calella–Llafranc del 1 de julio al 31 de agosto, de 07:30 a 23:15, ideal para enlazar con el camí de ronda y encadenar miradores.
En Begur, el Bus Platges recorre a diario el triángulo Sa Riera, Sa Tuna y Aiguablava durante la temporada estival, evitando los aparcamientos llenos y las carreteras estrechas.
Rutas cortas desde las paradas: del bus al agua turquesa
Quien baja en Calella de Palafrugell camina pocos minutos hasta Port Bo y enlaza hacia Llafranc por un paseo escénico con escaleras cómodas y pasarelas junto al mar. Desde Llafranc, la subida opcional al Far de Sant Sebastià regala balcones azules sin grandes complicaciones.

En Begur, la parada de Aiguablava deja el anfiteatro turquesa a escasos minutos y permite un tramo del camí de ronda hacia Fornells. ¿Se puede llegar a calas más salvajes desde un pueblo grande?
En Palamós, el acceso a Castell abre caminatas suaves hacia s’Alguer y Cala Estreta. Además, hay un bosque de pinos, roca rojiza y agua transparente a poca distancia.
Horarios útiles y lanzaderas que marcan la diferencia
El Bus 30 de Palafrugell opera cada pocos minutos en horas punta estivales, enlazando con playas desde temprano hasta la noche. El Bus Platges de Begur ofrece salidas regulares entre 09:50 y 20:00 hacia Sa Riera, y frecuencias entre 10:30 y 19:30 para Aiguablava, con origen en plaça Forgas. En el Parc Natural de Cap de Creus, la lanzadera conecta Cadaqués con Guillola, Tudela y el Faro, entre 08:00 y 23:30, reduciendo coches y mejorando la experiencia en calas rocosas de agua luminosa.
Consejos de temporada para acertar con la marea humana
La costa luce mejor a primera hora y al atardecer, cuando la luz suaviza colores y baja la afluencia. Viaja con zapatilla estable y escarpines para roca húmeda, y evita saltos sin comprobar profundidad. En días de tramontana, resguárdate en bahías orientadas al sur o cambia a un tramo interior.

Lleva agua y protección solar; muchos tramos carecen de sombra y servicios. Si buscas foto, imagina una imagen del acantilado de Tudela con mar plato y cielo rosado, o el blanco de Port Bo encendido al amanecer.
Los municipios refuerzan el transporte estival hacia playas para reducir presión sobre calas pequeñas. La lanzadera de Cap de Creus amplía la ventana diaria y suma paradas clave. Mientras, Palafrugell y Begur mantienen servicios de playa con mayor regularidad en agosto.
Confirma horarios del día y posibles cierres por riesgo de incendio; algunos accesos se restringen durante episodios de calor y viento. La recompensa, sin coche, es doble: menos estrés logístico y un litoral más sereno para caminar y bañarte con tiempo. Las calas de la Costa Brava se disfrutan mejor cuando el trayecto forma parte del paisaje.