Hombre con expresión de sorpresa señalando una sucursal del banco Santander

Aviso urgente del Banco Santander relacionado con Bizum

Las estafas más comunes en Bizum y cómo la App de Santander te ayuda a protegerte

En un entorno económico donde la inmediatez digital ha redefinido por completo las transacciones cotidianas, herramientas como Bizum se han erigido como protagonistas indiscutibles. La era del efectivo parece ceder terreno de forma acelerada ante la comodidad de enviar dinero con un simple toque en el móvil. Esta plataforma, integrada en la práctica totalidad de la banca española, ha transformado los pequeños pagos entre particulares, las contribuciones a causas solidarias y las compras online, consolidándose como un pilar de la economía digital del día a día.

Sin embargo, este éxito sin precedentes trae consigo una contrapartida ineludible: la atención de actores malintencionados que buscan explotar cualquier resquicio de vulnerabilidad.

La popularidad de Bizum como imán para el ciberfraude

El crecimiento exponencial de Bizum no ha pasado desapercibido para los ciberdelincuentes. Su facilidad de uso, que es su mayor virtud, puede convertirse en un arma de doble filo si no se utiliza con la debida cautela. Conscientes de esta realidad, entidades como el Banco Santander emiten constantes recordatorios y alertas a sus clientes, no por una falla en el sistema, sino como una llamada a la prudencia.

Oficina del Banco Santander y un iPhone 16
Imagen del Banco Santander y de un móvil | XCatalunya, @santander_es

El "aviso urgente" no es tanto una alarma sobre un nuevo fallo de seguridad, sino una advertencia sobre la sofisticación creciente de las técnicas de ingeniería social que buscan engañar al usuario, el eslabón más vulnerable de la cadena. La seguridad de la plataforma está respaldada por la robustez de los sistemas bancarios, pero la decisión final de autorizar una operación recae siempre en el titular de la cuenta.

El método de la solicitud inversa y otras estafas a vigilar

Una de las estafas más extendidas y efectivas es la conocida como "solicitud inversa". En lugar de enviar dinero, el estafador envía una solicitud de cobro, confiando en que la víctima, por distracción o desconocimiento, la acepte pensando que está recibiendo un pago. Este simple engaño ha causado estragos, especialmente en transacciones de compra-venta de segunda mano.

Es crucial entender el funcionamiento básico de la aplicación: una operación de envío de dinero nunca requerirá una acción de aceptación por parte de quien lo recibe. Si recibes una notificación para autorizar con tu clave, significa que estás a punto de enviar dinero, no de recibirlo.

Un hombre con camiseta rosa señala hacia arriba mientras sostiene un teléfono móvil que muestra el logo de Bizum.
Montaje de una persona con Bizum | Viktor Gladkov, XCatalunya

Para mitigar los daños potenciales, el sistema Bizum, de manera coordinada entre todas las entidades, establece límites operativos. Por ejemplo, un usuario no puede recibir más de 60 operaciones al mes ni un importe acumulado superior a 2.000 euros en un solo día. Aunque estos límites pueden parecer una restricción, en realidad funcionan como un cortafuegos que contiene las pérdidas en caso de que una cuenta sea comprometida o el usuario sea víctima de un fraude continuado.

La clave de firma y otras barreras de protección en la App Santander

Frente a estas amenazas, el Banco Santander y el resto de las entidades financieras han reforzado las medidas de seguridad directamente en sus aplicaciones. El paso más importante y que nunca debe ser subestimado es la introducción de la clave de firma.

Cada operación de envío de dinero a través de Bizum desde la App Santander exige esta contraseña personal e intransferible, un segundo factor de autenticación que certifica que es el titular legítimo quien ordena el movimiento. Las autoridades y los bancos insisten: esta clave es tan secreta como la contraseña de acceso a la banca online y jamás debe compartirse con nadie, bajo ninguna excusa.

Además, para las operaciones en comercios electrónicos, se ha implementado la "Clave Bizum", un código único de cuatro dígitos que funciona de manera similar al PIN de una tarjeta de crédito. Esta clave, que se genera desde la propia aplicación del banco, añade una capa extra de seguridad para las compras online, separando las credenciales de los pagos entre particulares de las utilizadas en tiendas virtuales.

La recomendación es clara: antes de autorizar cualquier movimiento, es imperativo leer con atención cada pantalla, verificar el concepto, el importe y, sobre todo, la naturaleza de la operación para asegurar que estamos enviando dinero y no aceptando una solicitud de cobro fraudulenta.