Pep Plaza es un conocido actor y humorista. Muy querido en Cataluña por sus interpretaciones en el 'Polònia' de TV3, también ha participado en otros shows a título personal. Hace de Pedro Sánchez, pero también de otros personajes importantes de este programa de sátira política que dirige Toni Soler, a través de su productora Minoria Absoluta. Sin embargo, en su última interpretación no ha hecho reír. Todo lo contrario. Pep Plaza concedió en su día una entrevista a Rac1, con Jordi Basté donde pudimos ver el drama familiar que está sufriendo. Los problemas de esquizofrenia de su hermano pequeño hace años que afectan a la estructura y al núcleo familiar.
Su madre ha vivido 25 años de maltrato verbal por parte del hijo. Y ahora, además, ha tenido que irse de su casa. “Da miedo cómo esta enfermedad ha invadido a mi hermano. Son gritos, golpes, que mi madre caiga al suelo y no la recoja, que le bloquee el móvil, que la controle, que esté tomando un café con las amigas y que le monte un espectáculo porque no le compra un bocadillo. Extorsionarla económicamente, insultarla, gritarla”, relató.
El actor explicó que el problema empezó cuando su hermano realizaba el servicio militar, a sus dieciocho años. “Al principio lo llevaba bien. Luego, comienza a consumir y perdemos un poco el control de su vida”. No debemos olvidar la muerte del padre. Pep Plaza tenía 18 y su hermano 13. El problema resumido en pocas palabras: "hay enfermos que no se dejan ayudar".
Y éste es el hermano de Pep Plaza. “Llega un momento en el que no puedes hacer mucho. Acabas yendo allí, hablando con los médicos y diciendo que la situación es la que es, pero no pueden realizar un ingreso involuntario. Tienes que llamar al 112, necesitas un justificante… Además, si en el momento en que llegan los Mossos la persona ya no está alterada, ya no pueden ingresarla; es bastante desesperante”, relata el actor.
Una enfermedad que es un problema grave en muchas familias
La esquizofrenia es un trastorno mental complejo que no solo afecta a quienes la padecen, sino también a sus familias. Esta enfermedad puede alterar profundamente las dinámicas familiares, presentando retos únicos que requieren comprensión, paciencia y estrategias específicas para su manejo. Cuidar a un ser querido con esquizofrenia puede ser una fuente significativa de estrés. Los comportamientos impredecibles y las necesidades cambiantes de la persona afectada pueden generar una constante sensación de incertidumbre y ansiedad en los familiares.
Las relaciones familiares pueden sufrir tensiones. Los roles dentro de la familia a menudo cambian, lo que puede afectar a todos los miembros, incluidos los hermanos, los padres y las parejas.