Joana Vilapuig saltó a la fama gracias a su papel en la serie catalana Polseres Vermelles. Donde encarnó a una de las entrañables pacientes de hospital que tanto emocionaron a la audiencia, Cristina. Desde entonces, su trayectoria en la interpretación ha continuado en ascenso, sumando proyectos televisivos y cinematográficos que confirman su versatilidad.
Con un talento natural y carisma indudable, la actriz catalana se ha convertido en uno de los rostros más reconocibles de la ficción catalana de los últimos años. Además de su etapa en Polseres Vermelles, Joana ha participado en otras producciones como Selftape. Una serie donde comparte pantalla con su hermana, Mireia Vilapuig, y que explora el lado más personal y profesional de sus protagonistas.
La dedicación y constancia de Joana en cada proyecto la han llevado a consolidarse como una actriz que conecta fácilmente con el público. A quien cautiva por la cercanía y honestidad que proyecta ante las cámaras. Tras su aparición en múltiples rodajes, Joana ha permanecido generalmente discreta respecto a su vida personal.
Sin embargo, en los últimos años ha salido a la luz la historia de amor que vive con el actor británico Tom Sturgess. Un joven que llegó a Barcelona casi por azar y que ahora se ha convertido en una de las personas más importantes en la vida de la actriz. ¿Cómo se conocieron y qué los ha llevado a ser una pareja tan entrañable?
Un actor británico en Catalunya
Tom Sturgess, originario de Wigan (Inglaterra), jamás imaginó que terminaría actuando en un idioma diferente al inglés. Su idea inicial era pasar solo unos meses en Barcelona durante la pandemia. Trabajando como profesor de inglés mientras el teatro en su país se encontraba paralizado.
Sin embargo, la ciudad y las circunstancias lo llevaron a aprender el catalán, una lengua que decidió estudiar con ahínco para integrarse mejor en el entorno cultural que lo rodeaba. La oportunidad de regresar a Londres le llegó gracias a su participación en Harry Potter and the Cursed Child en el West End.
Uno de los espectáculos teatrales más premiados de la escena británica. No obstante, en junio de 2020 ocurrió algo que cambió por completo sus planes: conoció a Joana Vilapuig, nacida en Mollet del Vallès y famosa por su papel en Polseres Vermelles.
El flechazo fue inmediato y, tras un año y medio trabajando en Londres, Tom decidió volver a Barcelona. Con la firme intención de compaginar su carrera internacional con su vida personal al lado de la actriz.
La curiosa historia de amor entre Joana y Tom
El propio Sturgess ha relatado cómo se enamoró no solo de Joana, sino también de la cultura, la música y amigos de la actriz. Desde entonces, su gran meta ha sido integrarse por completo en el día a día barcelonés y ganar la suficiente soltura en catalán como para desenvolverse con naturalidad. La familia y el círculo de amistades de Joana han acogido con agrado su interés por la lengua y las costumbres locales.
Y Tom, por su parte, se ha dejado seducir por cada faceta de la vida catalana. Pese a su juventud, Tom ya ha superado pruebas de gran exigencia escénica. Realizó ocho audiciones para conseguir el papel de un estudiante de Gryffindor en la obra de Harry Potter, llegando a imponerse a centenares de aspirantes.
Paralelamente, trabajó en Londres como actor y, en ocasiones, complementa esa actividad con empleos más mundanos, algo muy habitual en la escena teatral inglesa. Mientras tanto, cada vez que la oportunidad se presenta, regresa a Barcelona para seguir alimentando tanto su relación con Joana como también su pasión por la interpretación en lengua catalana.