El Rey Felipe VI parece haber fijado un nuevo objetivo dentro de la Casa Real: alejar a su sobrina, Victoria Federica, del foco mediático que tanto ha incomodado siempre a Zarzuela. En los últimos años, Victoria Federica ha seguido los pasos de su hermano Froilán, involucrándose en polémicas que han puesto en tensión la imagen de la monarquía española. Desde fiestas hasta su inusual estilo de vida, la joven se ha convertido en una figura difícil de controlar para la Casa Real, que ha intentado, sin éxito, manejar la situación.
La preocupación del Rey Felipe VI no es nueva. Desde hace tiempo, el Rey ha mostrado su descontento con las apariciones públicas y la creciente fama de Victoria, que se ha convertido en una habitual en fiestas exclusivas en Madrid. La presión mediática y las constantes controversias que la rodean han forzado a la Casa Real a buscar soluciones más drásticas.
La misma jugada que hicieron con su hermano
Al igual que su hermano Froilán, quien fue enviado al extranjero para apartarlo de las malas influencias y de los escándalos, se baraja la posibilidad de hacer lo mismo con Victoria. El Rey Felipe VI ha estado moviendo contactos para encontrarle una oportunidad laboral lejos de España, con ofertas tentadoras que incluso implican contratos de seis cifras, según se ha rumoreado. Este tipo de movimientos no son nuevos en la Casa Real, donde se ha intentado, en más de una ocasión, reducir la exposición de sus miembros más jóvenes.
Sin embargo, el carácter de Victoria Federica es un desafío. A diferencia de Froilán, quien aceptó su "exilio", Victoria no parece estar dispuesta a abandonar Madrid, ni su círculo social. Ha dejado claro que no planea renunciar a la vida que tanto disfruta, lo que ha generado tensiones dentro de la familia.
La imagen de la Casa Real ha sido cuidadosamente protegida durante años, pero el comportamiento de Victoria Federica está poniendo en riesgo esa estabilidad. Para el Rey Felipe VI, enviar a su sobrina fuera de España es una forma de alejarla de todos los focos mediáticos que tanto afectan a la monarquía. Las opciones que se manejan incluyen destinos como Abu Dabi o Los Ángeles, lejos del entorno madrileño que parece haber atrapado a Victoria en una espiral de excesos.
Este intento por parte del Rey también viene de la mano de Jaime de Marichalar, padre de Victoria, quien ha utilizado su red de contactos para conseguirle ofertas en el extranjero. Sin embargo, el verdadero reto será convencer a la joven de que lo mejor para su futuro y el de la familia es que tome distancia de España.
Mientras tanto, la tensión sigue aumentando dentro de la Casa Real. Felipe VI busca una solución rápida para evitar más escándalos. Y aunque Victoria Federica se resiste, todo indica que las presiones para que se vaya de España no cesarán en el corto plazo.