Una mujer con tiara y vestido azul sonríe frente a un fondo degradado de colores naranja y azul.

Máxima preocupación en Reino Unido por la Reina Camilla

La mujer del Rey Carlos III mantiene en vilo a los británicos

El año ha comenzado con un clima de incertidumbre alrededor de la Reina Camilla, quien ha retomado su agenda tras el parón navideño con un compromiso en el hospital de Wiltshire. Si bien la visita tenía un cariz informativo y de apoyo al centro médico, un comentario inocente de la soberana ha generado inquietud en los medios británicos, añadiéndose a los rumores que giran en torno a su estado de salud.

La esposa del  Rey Carlos III aseguró que no pisaba ese hospital “desde hace, al menos, 47 años, cuando tuve a mi hija”, en clara referencia a Laura Lopes, nacida en 1978. Sin embargo, la confusión radica en que el hospital que visitaba fue construido en 2002, lo que hace imposible que Camilla diera a luz allí.

Hombre con uniforme militar y gorra, fondo morado.
Rey Carlos III | @theroyalfamily, Canva Creative Studio, XCatalunya

Un despiste que enciende alarmas

El desliz de la reina no ha pasado desapercibido en el país. Medios como la revista Hello! han minimizado el hecho, comentando que tal vez Camilla simplemente “recordaba mal” la localización exacta del lugar donde dio a luz. Sin embargo, otros periódicos han puesto el acento en la posibilidad de un cierto despiste o desorientación.

Aunque no hay prueba alguna de que se trate de algo grave, el simple equívoco ha sido suficiente para avivar la curiosidad de la prensa, más aún porque la reina Camilla ha atravesado recientemente problemas de salud.

Una salud delicada y una baja reciente

Semanas atrás, el Palacio de Buckingham emitió un comunicado confirmando que la reina había sufrido una grave infección de pecho, obligándola a tomarse una semana de reposo absoluto. Pasado ese plazo, volvió a sus compromisos públicos con una mejora lenta, si bien confió abiertamente en su equipo médico. Ella misma reconocía en un acto posterior que todavía arrastraba una tos persistente y que siempre necesitaba “más tiempo de lo normal” para recuperarse al cien por cien de un resfriado.

En esta ocasión, el problema no era cualquier constipado, sino una infección de pecho que, a sus 76 años, generó un notable temor en su entorno, sobre todo teniendo en cuenta la frágil salud de su marido, el Rey Carlos III, y la de la propia Kate Middleton, ambos enfermos de cáncer, según apuntan ciertas fuentes.

Un hombre mayor con traje y corbata está rodeado de flores coloridas.
Rey Carlos III | @theroyalfamily

La experta real Jennie Bond comentaba a la revista OK! que Camilla estaba siguiendo todas las indicaciones médicas al pie de la letra, principalmente para evitar contagiar al soberano o a la princesa de Gales, cuya salud se considera también “vulnerable”. En los últimos compromisos, Camilla ha aparecido “mejorada”, si bien se la notaba más precavida que nunca, evitando esfuerzos innecesarios.

Ambiente de prudencia... por ahora

El despiste del hospital, unido a la infección de pecho de la que se está recuperando, ha llevado a un ambiente de máxima preocupación en Reino Unido, donde muchos temen que se trate de señales de un cansancio mayor o de cierta vulnerabilidad a su edad.

De momento, las fuentes oficiales mantienen la calma y el hermetismo. Camilla, según su entorno, continuará con su agenda programada, confiando en que todo quede en un simple lapsus. Aun así, la prensa británica, siempre atenta a detalles que puedan indicar otro contratiempo en la Corona, no ha podido pasar por alto este curioso capítulo.