La meteórica ascensión a la fama que ha conseguido Rosalía a lo largo de los últimos años, es realmente asombrosa, prácticamente imparable. La inefable autora de "Despechá" y "Bizcochito" no se ha olvidado de su tierra coincidiendo con una degustación en Francia.
Hace pocos días, Rosalía fue de cena en un restaurante parisino junto a su hermana Pili y su directora artística Carlota Guerrero donde fueron convencidas para degustar un plato típico de la capital francesa: los escargots de Bourgogne. Estos caracoles de Borgoña son algo excepcional para los paladares de cualquier rincón del planeta, exceptuando quizá para los de la gente de Lleida, acostumbrada a sus legendarios "caracoles a la llauna".
Aunque de entrada, fueron muchos los catalanes que discutieron la degustación de esos caracoles, porque no eran los propios de su tierra natal, y además se sirvió de la ayuda de un tenedor (cuando en Lleida lo típico es utilizar los dedos para ello), la famosa artista reconoció que le gustan los caracoles, aludiendo al característico plato que se vincula con Catalunya.
Rosalía y su catalanidad
La reconocida cantante de gran impacto internacional, mantiene una relación un tanto compleja con el pueblo catalán, por lo que cualquier guiño hacia su tierra de nacimiento, puede servir para avivar cierta tensión. Conviene recordar que cuando publicó su primera canción en catalán, "Millonària", sirvió como crítica para todos aquellos que le consideran una artista sobrevalorada y con ganancias desmesuradas. Además perjudicó la salud de unos cuantos filólogos usando la palabra "cumpleanys" en vez d'"aniversari".
Nacida en Sant Esteve Sesrovires, el 25 de septiembre de 1992, Rosalía es una catalana orgullosa de ello, aunque su ideología suele ser algo enigmática. Si bien por un lado, se le criticó por no aprovechar las posibilidades por no hacer ninguna referencia pública e internacional a los presos políticos durante la gala de los Grammy Latinos, celebrada en 2018, también es cierto que posteriormente, en 2020, colgaría un video con una estelada. Su inclinación ideológica y su posición con el movimiento independentista catalán, sigue generando dudas de todo tipo.
Con un perfil personal en Instagram que tiene cerca de 28 millones de seguidores, casi cinco millones en X (Twitter) y más de 11 millones de subscritores en su canal de YouTube, los capítulos personales y profesionales de Rosalía alcanzan una repercusión internacional tremenda. Ya sea la publicación de un nuevo álbum, o su degustación en un restaurante, el devenir de Rosalía paraliza el interés social de nuestros días.