Un hombre con traje y corbata roja camina por la calle mientras en un recuadro se ven tres personas caminando juntas.

La decisión de Juan Urdangarin que no gustará a su madre, Cristina de Borbón

Han intentado esconder la noticia pero no lo han conseguido

El tiempo pasa y los jóvenes de la familia Borbón van alcanzando la madurez. Prueba de ello es que, en los últimos meses, se han hecho públicas varias de sus relaciones sentimentales o se han insinuado de forma bastante clara. Mientras la heredera, la princesa Leonor, sigue manteniendo cierto misterio acerca de su vida personal —después de su relación con un joven brasileño llamado Gabriel—, su hermana Sofía y otros primos como Froilán o  Victoria Federica han mostrado más abiertamente sus amistades especiales. Sin embargo, el foco se concentra ahora en Juan Urdangarin, el hijo mayor de la infanta Cristina y de Iñaki Urdangarin, quien podría tomar una decisión que incomodaría profundamente a su madre.

Durante un reciente viaje a Catalunya para presenciar un partido de balonmano de su hermano Pablo en Granollers, Juan apareció acompañado de un joven con quien mostraba una gran complicidad. Según apuntan algunos medios, este amigo íntimo sería además su compañero de piso en Londres, donde ambos trabajan. El primogénito de los  exduques de Palma, quien estudió Relaciones Internacionales y Marketing en la Universidad de Essex y dedicó un año a labores de cooperación en Camboya, ejerce actualmente en una empresa de Fórmula E fundada por Alejandro Agag. Se trata de un entorno laboral que encaja bien con sus inquietudes medioambientales y que, al mismo tiempo, lo mantiene muy ocupado viajando dentro y fuera del Reino Unido.

Un hombre joven con barba y camisa azul, con una imagen de un hombre mayor en uniforme militar en un círculo rojo en la esquina superior izquierda.
Juan Urdangarin | Juan Urdangarin, Felipe VI, Casa Real, XCatalunya

Aunque Londres parecía haberle proporcionado estabilidad tanto en lo profesional como en lo emocional, Juan Urdangarin estaría valorando dar un importante cambio de aires. Según ha publicado ‘Informalia’, el joven se plantea la posibilidad de mudarse a Vitoria, la ciudad donde reside su padre, Iñaki Urdangarin, junto a su pareja, Ainhoa Armentia, y donde también vive su abuela paterna, Claire Liebaert. De confirmarse este movimiento, la repercusión sería notable, sobre todo teniendo en cuenta la incómoda relación que mantiene actualmente la infanta Cristina con su exmarido.

Desde que la hermana de Felipe VI y Iñaki Urdangarin firmaron los papeles del divorcio, se ha sabido que no conservan demasiadas ganas de interactuar. El distanciamiento entre ellos es evidente, tanto en lo personal como en lo mediático. Así, la posibilidad de que Juan traslade su vida a la misma ciudad que su padre y la nueva pareja de este podría sentar como un jarro de agua fría a su madre, quien preferiría sin duda mantener a sus hijos cerca de ella. Además, si ese cambio incluye a su “amigo íntimo” —a quien algunos sitúan directamente como su pareja sentimental—, la convivencia en Vitoria se antoja todo un golpe a las expectativas de Cristina de Borbón.

Cambio de Londres por Vitoria

De naturaleza reservada y alejada de la sobreexposición mediática, Juan Urdangarin ha encontrado en Londres un lugar discreto para desarrollarse, tanto laboral como personalmente. No obstante, el deseo de estar más cerca de su padre y de su abuela podría prevalecer sobre su actual comodidad en la capital británica. A ello se suma el cansancio que a veces provoca llevar una vida frenética en una gran urbe, lo cual suele generar anhelos de un entorno más recogido y familiar.

Una mujer y un hombre caminando juntos, con un hombre mayor en un círculo rojo en la esquina superior derecha.
Juan Urdangarin y su madre | Casa Real, XCatalunya

Por ahora, todo sigue en el plano de los rumores y no existe confirmación oficial. Sin embargo, las fuentes cercanas a Juan aseguran que el joven está valorando seriamente el cambio. Si decide dar el paso, la reacción de su madre, la infanta Cristina, no será precisamente de entusiasmo. A fin de cuentas, se trata de la elección de un hijo que, cada vez más, marca su propia ruta, a menudo distante de los deseos de su progenitora. Habrá que ver si finalmente se produce la mudanza a Vitoria y si su “amigo especial” hace el viaje con él, conformando un nuevo núcleo en la vida de los Urdangarin y generando una dinámica familiar tan inesperada como controvertida.