Un hombre con barba y cabello rizado mira a la cámara con la mano apoyada en su rostro, en un entorno interior con una lámpara y un mueble al fondo.

El aplaudido discurso de Quim Gutiérrez sobre las redes sociales

Esta semana se estrena la nueva película en la que participa

Cada vez son más las figuras públicas que critican abiertamente las redes sociales. La toxicidad y el odio que proliferan en estas plataformas han llevado a muchas celebridades a reducir su presencia digital. Algunos han adoptado medidas drásticas para proteger su bienestar mental y emocional.

En una reciente entrevista en RAC1, Quim Gutiérrez abordó este tema con una claridad y honestidad que han sido muy aplaudidas. “Vigilo mucho el tiempo que paso en las redes sociales porque me afectan”, confesó. Según el actor, el problema no radica únicamente en las redes sociales en sí, sino en cómo influyen en las emociones de quienes las utilizan. Gutiérrez no niega los aspectos positivos de estas plataformas. “Hay historias humanas muy interesantes que surgen gracias a las redes sociales y no quiero perdérmelas”, explicó. Sin embargo, lamenta profundamente el odio que muchas veces las domina.

Hombre con suéter gris y rosa y chaqueta negra posando frente a una pared beige.
Quim Gutiérrez, actor | @quimyo

Los límites del humor y la importancia de reflexionar

El actor también reflexionó sobre los límites del humor en el contexto de su nueva película, Al otro barrio, que se estrena este jueves. Este remake de la comedia francesa Bienvenidos al barrio presenta situaciones cómicas que rozan lo políticamente incorrecto. Gutiérrez admitió que inicialmente le preocupaban algunos de los chistes del guion.

“Cuando perteneces a un colectivo que normalmente no se ha sentido ofendido, tienes mucha libertad”, señaló. Sin embargo, considera esencial cuestionarse el impacto de los comentarios humorísticos. Según Gutiérrez, es positivo que las producciones culturales revisen sus contenidos para garantizar que no perpetúen estereotipos o agravios.

Hombre sin camisa con una toalla blanca alrededor de la cintura, cepillándose los dientes frente a un espejo en un baño con azulejos morados.
Selfie de Quim Gutiérrez | @quimyo

En este caso, el equipo creativo de la película optó por consultar con personas pertenecientes a los colectivos sobre los que se hacían bromas. “Pasaron el guion a esas personas, y nos dijeron que les parecía muy bien lo que decíamos”, explicó el actor. Este ejercicio de autoconsciencia es, para Gutiérrez, una manera de enriquecer el humor sin dejar de ser responsables.

El actor también habló de su buena relación con la directora Mar Olid, con quien ya había trabajado en la serie El vecino. “Hay directores con los que no repetiría porque hemos tenido visiones diferentes”, reconoció, por otro lado. Gutiérrez prioriza siempre trabajar en un ambiente profesional donde exista un buen entendimiento mutuo.

Tras el estreno de Al otro barrio, Gutiérrez ya tiene entre manos un nuevo proyecto que promete captar la atención del público. Se trata de un remake de la famosa comedia británica Un funeral de muerte. La adaptación traslada la historia al contexto español, pero mantiene la esencia de la trama original.