El futuro de Frenkie de Jong vuelve a centrar todas las miradas en el FC Barcelona. El mediocampista neerlandés, fichado en 2019 tras su espectacular irrupción en el Ajax, experimenta ahora una situación muy distinta a la soñada cuando aterrizó en el Camp Nou. Con contrato hasta junio de 2026 y un valor de mercado que ronda los 45 millones de euros —lejos de los 90 que alcanzó en diciembre de 2019—, De Jong apenas está teniendo minutos en la presente campaña bajo las órdenes de Hansi Flick.
Sus estadísticas este curso confirman la poca confianza que el técnico alemán le ha otorgado: en 13 partidos oficiales (8 de LaLiga y 5 de Champions), el centrocampista solo ha sumado 362 minutos, anotando un único gol y repartiendo una sola asistencia. Es, de hecho, el segundo centrocampista menos utilizado, sólo por delante de Gavi, que se perdió varias jornadas por lesión. Estas cifras contrastan con las acumuladas en temporadas anteriores, donde De Jong solía rondar los 3.000 minutos anuales y se consolidaba como uno de los referentes en la medular azulgrana. Sin embargo, los cambios en el banquillo y la llegada de nuevos refuerzos han provocado un papel secundario que ni el futbolista ni el propio club parecen dispuestos a prolongar.
La necesidad económica y la urgencia deportiva
El FC Barcelona se encuentra inmerso en un escenario financiero delicado. El ajuste a los límites salariales de LaLiga exige una disminución de la masa salarial, objetivo para el que la salida de De Jong se considera prioritaria. Además de ese alivio económico, el club persigue abrir hueco para posibles incorporaciones en el mercado de invierno. La elevada ficha del mediocampista neerlandés supone uno de los mayores lastres para la economía culé, por lo que su salida se valora como la solución idónea.
Las circunstancias deportivas también empujan en la misma dirección. De Jong no entra en los planes de Flick, quien ha relegado al neerlandés a un segundo plano. A sus 27 años, el futbolista no puede permitirse un rol residual, pues desea seguir creciendo y compitiendo en la élite. Durante los últimos meses, su compromiso con el Barça ha sido inquebrantable, pero la falta de oportunidades actuales resulta difícil de asumir.
Bayern de Múnich: el destino más probable
Entre los clubes que han manifestado interés en De Jong, el Bayern de Múnich cobra fuerza, según informa El Nacional. El gigante de la Bundesliga, dirigido ahora por Vincent Kompany, pretende reforzar su centro del campo con un jugador de calidad contrastada y apto para la Champions League. El estilo de juego del neerlandés, basado en la posesión y la distribución inteligente, encaja a la perfección en la filosofía de un Bayern que busca recuperar el dominio europeo.
Por su parte, De Jong percibe esta alternativa como la posibilidad de revitalizar su carrera. En Múnich encontraría a un técnico que valora el juego combinativo, un entorno altamente competitivo y opciones reales de pelear por grandes títulos. Además, la afición bávara tiene experiencia en acoger con éxito a futbolistas provenientes de otras potencias europeas, lo que supondría un contexto favorable para su rápida adaptación.
La operación, según apunta esta fuente, podría darse incluso este mismo mes de enero. Todo depende de que el Bayern de Múnich se decida por apostar por el neerlandés y pique a las puertas de los despachos azulgranas. Joan Laporta y compañía estarán encantados de escuchar qué tienen que proponerle los bávaros.