El mercado de invierno se acerca y, con él, la posibilidad de que el Celta de Vigo sufra una baja significativa en su delantera. En concreto, Anastasios Douvikas, delantero griego que desembarcó con la vitola de titular, podría haber pedido salir ante la falta de minutos y protagonismo en el equipo. Esta decisión ha generado un inevitable revuelo en la afición, ya que su salida forzaría al conjunto celeste a buscar un sustituto de garantías en el mercado. En este sentido, el nombre que más resuena en el entorno vigués es el de Iker Losada, canterano de A Madroa que, tras pasar por el Racing de Ferrol y fichar por el Real Betis, podría regresar a casa como “plan B” para la punta de ataque.
Douvikas, que lleva 18 partidos disputados esta temporada (17 en LaLiga y 1 en Copa), ha sumado 5 goles y 1 asistencia en un total de 715 minutos de juego. Aunque sus números no son desorbitados, la calidad que mostró en las primeras jornadas hacía pensar que alcanzaría una mayor continuidad. Sin embargo, Claudio Giráldez ha optado por otras variantes ofensivas, lo que ha abierto la puerta a la marcha del griego durante el mes de enero. Incluso se ha hablado de un posible destino en el Real Betis, que también busca un nueve titular de garantías y ve con buenos ojos la incorporación de un delantero contrastado.
Mientras tanto, en el otro lado de la balanza aparece Iker Losada, hoy en día en las filas del Betis pero con un rol secundario. Sus números esta temporada en el cuadro verdiblanco incluyen 14 partidos totales (10 en LaLiga, 2 en Copa y 2 más en la fase de clasificación de la UECL), con 585 minutos disputados y 1 asistencia. Aun sin haber marcado gol, el atacante de Catoira mantiene un buen cartel gracias a su prometedora trayectoria en el Racing de Ferrol, club al que llegó procedente del Celta Fortuna. Aquella excelente temporada en Ferrol le valió para fichar por el Betis el pasado verano a cambio de 1,8 millones de euros, tras haber pasado por todas las categorías inferiores del conjunto vigués.
El Celta se prepara para actuar
La principal duda que surge en el caso de Iker Losada es la fórmula de su posible incorporación. Desde Sevilla, se habla de que el Betis solo consideraría una cesión, pues confía a largo plazo en el atacante de 22 años. Mientras tanto, el Celta, actualmente en la undécima posición de LaLiga con 24 puntos, no puede permitirse perder peso ofensivo sin tener un recambio contundente. Con el equipo todavía lejos de asegurar la permanencia en una tabla clasificatoria muy apretada, la cesión de un delantero joven y con proyección como Iker Losada podría ser la solución perfecta si Douvikas se marcha.
A todo esto se suma el papel de Claudio Giráldez, técnico que llegó a Balaídos con la intención de rejuvenecer el proyecto celeste, pero que, por ahora, busca consolidar resultados ante la volatilidad de LaLiga. En su idea de juego, un atacante con la movilidad, rapidez y polivalencia de Losada encaja muy bien, ya que puede actuar tanto de referencia como caer a banda, creando espacios para segundos delanteros o mediapuntas.
Otra variable a tener en cuenta es la postura de Marco Garcés, responsable de la dirección deportiva en Vigo. Garcés está obligado a anticiparse a la posible salida de Douvikas y a rastrear opciones solventes en el mercado. El caso de Losada no es el único, pero sí uno de los más realistas dadas las circunstancias. El acuerdo dependería de si el Betis está dispuesto a negociar un préstamo o, con menor probabilidad, un traspaso en condiciones favorables para el Celta.