La cuenta atrás para el mercado de fichajes de invierno ya ha comenzado y el Celta de Vigo se prepara para afrontar cambios significativos en su plantilla. Uno de los futbolistas en el punto de mira es Jonathan Bamba, extremo costamarfileño con nacionalidad francesa que, a pesar de llegar como un fichaje ilusionante tras despuntar en el LOSC Lille, no ha terminado de encajar en el esquema de Claudio Giráldez. Desde su llegada al equipo vigués el 18 de julio de 2023, su rendimiento ha estado muy por debajo de las expectativas. Y ahora surge la posibilidad de una salida que beneficiaría a todas las partes implicadas.
La trayectoria profesional de Bamba cuenta con numerosos cambios de club, casi siempre en condición de cesión o libre. Se formó en la cantera del Saint-Étienne, donde fue escalando hasta el primer equipo antes de salir al Paris FC, el Sint-Truiden belga y el Angers SCO. Tras un posterior regreso al Saint-Étienne y su consolidación en la élite del fútbol francés, dio el salto al Lille sin coste de traspaso. Allí alcanzó uno de los puntos más altos de su carrera: se proclamó campeón de la Ligue 1 por delante del todopoderoso PSG y disputó la UEFA Champions League. Fue precisamente ese impacto en el LOSC Lille lo que llevó al Celta de Vigo a apostar fuerte por él, asumiendo un salario alto (en torno a los 4,1 millones de euros al año) y depositando la esperanza de convertirle en uno de los buques insignia del proyecto celeste.
No obstante, el presente curso dista mucho de aquel cartel de estrella que lució en el Lille. Según los datos de rendimiento de esta temporada, Bamba solo ha participado en 12 partidos, 11 de ellos en LaLiga y 1 en la Copa del Rey, sumando 760 minutos sin haber logrado marcar ni asistir. Si se añade a esto que la pasada campaña en Vigo tampoco fue especialmente brillante (3 goles y 2 asistencias en 27 encuentros), resulta comprensible el desencanto de la afición celeste, máxime cuando Bamba es uno de los futbolistas con mayor salario en la plantilla, incluso por encima de Iago Aspas. Algunos gestos que han molestado a la grada y un comportamiento distante han terminado por agotar la paciencia de muchos seguidores.
José Mourinho para reconducirlo
Ante esta situación, y con un Jonathan Bamba que no está contando para Claudio Giráldez, la directiva del Celta busca opciones para darle salida en enero. Una de las primeras opciones exploradas fue la de la liga de Arabia Saudí, uno de los pocos destinos capaces de asumir su alto salario. Sin embargo, según ha informado Estadio Deportivo, en las últimas horas ha emergido con fuerza la posibilidad de que recale en el Fenerbahçe turco, equipo entrenado por José Mourinho y que actualmente ocupa la segunda posición en la Süper Lig con 36 puntos, por detrás de un Galatasaray intratable que domina la clasificación con 44 puntos.
Para Bamba, fichar por el conjunto otomano podría ser una alternativa más atractiva que el fútbol saudí, puesto que el Fenerbahçe compite en la UEFA Europa League. De este modo, el extremo costamarfileño regresaría a un contexto europeo de alto nivel, donde ya demostró en su día su valía en el Lille y en la Champions League. El Celta, por su parte, vería aliviada su masa salarial y liberaría una ficha importante, circunstancia que, a su vez, permitiría reforzar otras demarcaciones en el inminente mercado invernal.
El interés real del Fenerbahçe, según se ha dado a conocer a los representantes del jugador, abre un escenario atractivo tanto para el club como para Bamba. Se buscaría una negociación lo bastante ventajosa para ambas partes, teniendo en cuenta que la cotización actual de mercado del futbolista, de acuerdo con Transfermarkt, se ha desplomado hasta los 4 millones de euros, lejos de los 25 millones que alcanzó en 2021. Por lo tanto, el Celta difícilmente recuperará la totalidad de la inversión emocional y económica realizada en su momento, pero al menos no quedaría atado a un jugador con un sueldo altísimo y sin rendimiento acorde.
A falta de conocer la decisión definitiva, lo cierto es que la situación de Jonathan Bamba en Vigo parece próxima a resolverse. Claudio Giráldez, que apenas le ha dado oportunidades en las últimas semanas, considera que el equipo necesita otros perfiles capaces de inyectar dinamismo y regularidad en la faceta ofensiva. El costamarfileño, por su parte, ansía reencontrar su mejor versión, y la Süper Lig podría proporcionarle un escenario adecuado para relanzar su carrera.