La situación en el Sevilla se encuentra en un punto crítico tras los últimos resultados deportivos y el nerviosismo que se respira en el entorno del club. Víctor Orta, director deportivo de la entidad, se ha convertido en el centro de atención, puesto que sigue buscando incorporaciones que permitan a Javier García Pimienta revertir la delicada marcha del conjunto hispalense. Por ahora, la única llegada oficializada ha sido la de Rubén Vargas, aunque desde las oficinas del Ramón Sánchez Pizjuán no descartan más movimientos en este mercado invernal. Según informa El Nacional, la dirección deportiva trabaja a contrarreloj para reforzar, sobre todo, la retaguardia y el centro del campo; y el directivo ya tendría a dos nombres en la agenda.
La venta de Loïc Badé al Aston Villa aparece en el horizonte como un escenario realista, teniendo en cuenta el interés que ha suscitado el central francés en la Premier League. Si su marcha llegara a producirse, el Sevilla perdería a uno de sus defensas más importantes, pero, a cambio, obtendría un ingreso económico significativo. Con ese capital, Orta se plantea cerrar dos fichajes que pueden elevar el nivel del equipo, solucionando algunas carencias que se han hecho más evidentes a medida que avanza la temporada. García Pimienta, por su parte, ha insistido desde el primer momento en la necesidad de apuntalar la zaga y de contar con alternativas que se adapten a la exigencia de La Liga EA Sports.
Es en este contexto de urgencias cuando surgen dos nombres propios que no habían sido vinculados de manera tan insistente hasta ahora. Se trata de dos defensas jóvenes, con proyección y experiencia en ligas europeas competitivas, cuyas condiciones encajan perfectamente en el perfil que busca el Sevilla. Orta, consciente del ritmo frenético del mercado y de la carencia de tiempo, ya habría tanteado su situación para incorporarlos antes del cierre de esta ventana de fichajes. Los dos refuerzos en cuestión apuntan directamente a reforzar el eje de la defensa y el flanco izquierdo.
El plan de Orta para reemplazar a Badé
El primero de estos fichajes responde a la necesidad urgente de suplir la posible baja de Loïc Badé. Hablamos de un central experimentado en el fútbol español, que dio el salto a Bélgica en 2021 y cuyo valor de mercado ronda los 6 millones de euros. Cuenta con una altura de 1,85 m y la versatilidad suficiente para desempeñarse como defensa central o lateral derecho, si la ocasión lo requiere. Su nombre es Mujaid Sadick, un jugador de 24 años nacido en Logroño y con raíces nigerianas, que milita en el KRC Genk desde julio de 2021. En la actual campaña, ha disputado 19 encuentros en la Jupiler Pro League (1 gol anotado) y 3 más en la Croky Cup, superando los 1.800 minutos de juego.
El Genk lo fichó procedente del Deportivo de la Coruña por cerca de dos millones de euros, tras brillar en La Liga Hypermotion. Ahora, su progresión en Bélgica ha elevado su valor hasta los 6 millones, e incluso se habla de que el Sevilla estaría dispuesto a llegar a los 8 ‘kilos’ para hacerse con sus servicios. La predisposición del defensa para volver a su país de origen ayudaría a agilizar el movimiento, siempre y cuando se concrete la venta de Badé.
Un lateral zurdo para equilibrar el equipo
El segundo nombre de la lista de Orta es Filipe Relvas, un defensa central portugués que también puede actuar como lateral izquierdo, cubriendo una demarcación que en el Sevilla solo cuenta con la confianza de García Pimienta en Adrià Pedrosa. Relvas, de 25 años y 1,92 m de estatura, milita en el Portimonense de la liga portuguesa. Su valor de mercado actual se estima en 2 millones de euros, aunque llegó a rondar los 3,5 en meses anteriores. En la presente campaña, en la Liga Portugal 2 y la Taça de Portugal, acumula un total de 18 partidos, en los que ha anotado 1 gol y superado los 1.560 minutos.
Relvas pasó por varias categorías del SC Espinho y el Pedras Rubras antes de aterrizar en el Portimonense, donde ha explotado y llamado la atención de numerosos observadores. Su envergadura física y su habilidad para adaptarse a diferentes sistemas tácticos le han granjeado la reputación de defensor polivalente. Para el Sevilla, supone una oportunidad de firmar un jugador relativamente asequible, y con la ventaja de poder crecer y pulir sus defectos en una competición como La Liga EA Sports.
De completarse ambos fichajes, el desembolso total rondaría los 10 millones de euros, una cifra que desde Nervión consideran asumible, sobre todo si se concreta la marcha de Badé al Aston Villa. En cualquier caso, la decisión final recae en Javier García Pimienta, que tendrá la última palabra. El técnico, con la directiva siguiendo sus recomendaciones, analizará la forma en que Mujaid Sadick y Filipe Relvas encajan en su esquema defensivo. Con los problemas de lesiones y la necesidad de renovar la línea de retaguardia, la llegada de dos jugadores jóvenes y con proyección podría resultar clave para que el Sevilla enderece el rumbo en lo que resta de temporada.