El FC Barcelona selló un triunfo contundente ante el Sevilla en el Sánchez Pizjuán (1-4). A pesar del abultado marcador, el duelo no fue un paseo triunfal para los de Hansi Flick, que vivieron momentos de tensión en determinados tramos. El equipo local aprovechó el impulso inicial para poner las cosas complicadas a los visitantes, pero los azulgranas reaccionaron con determinación y eficacia.
El partido dejó, además, varias imágenes que no pasaron desapercibidas. Por un lado, la fortaleza anímica del Barcelona para reponerse tras el tempranero empate sevillista. Por otro, la intensidad con la que se jugó, tanto que acabó con una expulsión en las filas blaugranas.
Saltaron las alarmas con Araujo
La principal preocupación tras el encuentro se centró en Ronald Araujo, quien tuvo que retirarse debido a un problema en el tobillo derecho. Finalmente, la afición puede respirar tranquila: según la información ofrecida por el medio ‘Jijantes’, el central uruguayo fue sometido a pruebas médicas que descartaron cualquier lesión de gravedad.
Se trata tan solo de una contusión importante, lo que implica que en un plazo de entre una y dos semanas podría estar de nuevo disponible para Flick. El tiempo de recuperación de Araujo depende, en gran medida, de la evolución de la inflamación y del dolor.
Por ello, no se descarta por completo su presencia en el próximo compromiso liguero frente al Rayo, aunque todo indica que el técnico será prudente. El hecho de que el Barcelona ni siquiera haya emitido un comunicado médico oficial demuestra la escasa relevancia de esta dolencia. Al menos en comparación con las que sí exigen un seguimiento más exhaustivo.
La sustitución de Gavi, un tema táctico
Quien también llamó la atención fue Gavi, titular por segunda vez consecutiva en Liga. El canterano, que no pudo terminar el encuentro ante el Alavés en la jornada anterior por un duro golpe en la cabeza, volvió a exhibir su carácter intenso y combativo. Esta vez, sin embargo, fue una amarilla la que terminó condicionando su participación, hasta el punto de que decidió hablar con Hansi Flick para pedir el cambio tras el descanso.
Gavi explicó en zona mixta que prefería no arriesgar y que su sustitución obedecía a una cuestión estratégica. El andaluz es consciente de que los colegiados están muy encima de su estilo de juego, con entradas al límite que, en más de una ocasión, le han costado sanciones. Así lo recalcó el joven centrocampista, quien manifestó su temor a dejar a sus compañeros en inferioridad: “Los árbitros no se cortan conmigo”, confesó.
La gestión de Hansi Flick en ambos casos resulta clave para mantener un ambiente competitivo sin poner en peligro la salud de sus futbolistas ni los intereses colectivos del equipo. De momento, el Barça ha salido reforzado de un duelo en un estadio siempre complicado como el Sánchez Pizjuán.
Con la victoria ante el Sevilla, el conjunto azulgrana revalida su condición de aspirante a todo esta temporada. Sabiendo que pronto recuperará a un Ronald Araujo que, pese al susto inicial, parece haber evitado una lesión que lo apartara de los terrenos de juego durante un largo periodo.