La temporada ha traído sorpresas en el Atlético de Madrid. Tras meses de rumores y especulaciones, la portería rojiblanca vuelve a ser tema central para la afición y el entorno del club. Todo apuntaba a un cambio radical bajo palos, pero la situación ha dado un giro inesperado. El futuro de la portería parecía más abierto que nunca, hasta que los últimos acontecimientos lo han cambiado todo.
En los primeros meses de 2024, la continuidad de Jan Oblak se vio más cuestionada que nunca. Diferentes medios y voces cercanas al Atlético daban por hecho que el esloveno, uno de los pesos pesados del vestuario, iba a vivir su última campaña como rojiblanco. No era solo una cuestión de rendimiento: su salario, el más alto de la plantilla, y el deseo de iniciar una renovación profunda alimentaron los rumores sobre su marcha.
Las opciones para sustituir a Oblak no tardaron en salir a la luz. Porteros como Joan García, Unai Simón o Kepa Arrizabalaga aparecieron en la órbita colchonera. Incluso se mencionó que clubes europeos como Manchester United, Inter de Milán y PSG estaban interesados en hacerse con los servicios del guardameta. La situación parecía encaminada hacia una salida inminente, con una oferta que, según El Nacional, podía rondar los 25 millones de euros.

El rendimiento de Oblak y el Mundial de Clubes como punto de inflexión
Sin embargo, la realidad en el césped ha comenzado a cambiar la narrativa. A pesar de algunas dudas en temporadas anteriores, Oblak ha recuperado sensaciones y protagonismo justo cuando más lo necesitaba el equipo. Su papel en el reciente Mundial de Clubes ha sido decisivo. Aunque encajó cuatro goles en el duelo ante el PSG, su actuación evitó una goleada aún mayor y dejó detalles de su mejor versión.
El técnico Diego Pablo Simeone ha destacado públicamente el compromiso de su portero, valorando su experiencia en los momentos clave. Esto ha llevado a un cambio de planes dentro del club. Ahora, lejos de buscar una salida inmediata, la dirección deportiva parece apostar por mantener a Oblak como portero titular al menos una temporada más. La confianza se ha restablecido y todo indica que el relevo definitivo en la portería se pospondrá hasta el verano de 2026.
La estabilidad de la portería, clave para el Atlético de Madrid
La permanencia de Oblak no es solo una cuestión deportiva. Su figura representa estabilidad en un equipo que planea renovar otras posiciones prioritarias antes de abordar el relevo en la portería. El Atlético valora la seguridad que aporta un portero con más de una década en el club, acostumbrado a la presión de las grandes noches europeas y que, pese a los altibajos, mantiene un nivel competitivo.
Mientras tanto, los rumores sobre Joan García y otros porteros jóvenes siguen en el aire, pero han perdido fuerza en los últimos días. La dirección deportiva considera que un relevo inmediato podría ser arriesgado, sobre todo en un verano donde se esperan más movimientos en defensa y centro del campo.