El verano se presenta apasionante para dos históricos que han logrado regresar a Primera División. El Elche y el Levante UD buscan ahora consolidar sus proyectos con fichajes de calidad que ilusionen a sus aficionados y permitan afrontar el nuevo reto con garantías. El ascenso no sólo es un éxito deportivo, sino también un desafío a nivel de planificación y mercado, donde cada incorporación puede marcar la diferencia entre luchar por la permanencia o soñar con algo más.
El Elche, tras una temporada marcada por la solidez defensiva y el carácter de equipo compacto, y el Levante UD, que ha apostado por un juego ofensivo y dinámico bajo la dirección de Julián Calero, llegan al mercado con objetivos claros: reforzar posiciones clave sin perder la esencia del grupo que les devolvió a la élite. La experiencia reciente de otros equipos ascendidos demuestra que acertar en los primeros movimientos es vital para asegurar una adaptación rápida a la exigencia de la máxima categoría.
Ambos clubes han rastreado el mercado nacional en busca de futbolistas jóvenes y con proyección, que puedan aportar tanto presente como futuro. En este contexto, según ha informado el Diario de Sevilla, ambos se han fijado en Iker Losada, quien ha retornado al Real Betis tras su cesión en el Celta de Vigo.

Un fichaje con pasado brillante y presente por despejar
El Real Betis está afrontando un verano de importantes cambios en su plantilla. La dirección deportiva trabaja en más de una docena de operaciones para ajustar el vestuario a las exigencias de Manuel Pellegrini y el entorno verdiblanco. Entre los movimientos más sonados está la situación de Iker Losada, que hace sólo un año era considerado uno de los talentos más prometedores de LaLiga Hypermotion, tras firmar una temporada espectacular con el Racing de Ferrol.
Su llegada a Heliópolis generó grandes expectativas, ya que el club bético apostó por él con una inversión de 1,8 millones de euros. Sin embargo, la adaptación a la élite no ha sido sencilla. Tras una primera vuelta con pocas oportunidades, fue cedido al Celta, donde tampoco encontró la continuidad esperada. Ahora, de regreso a Sevilla, el futuro del futbolista está abierto y los clubes recién ascendidos han detectado una oportunidad.
Su estilo de juego destaca por la capacidad de desborde, la movilidad entre líneas y el buen manejo de ambas piernas. Es un futbolista con habilidad para asociarse y atacar los espacios, características muy valoradas por técnicos como Eder Sarabia y Julián Calero, que apuestan por un fútbol dinámico y de presión alta. Además, su juventud y margen de mejora lo convierten en un perfil ideal para equipos que buscan talento a precio de mercado razonable.
Las negociaciones están avanzadas y tanto Elche como Levante han puesto sobre la mesa opciones firmes para hacerse con sus servicios. Según informan medios cercanos al Betis, la operación podría cerrarse como una cesión con opción de compra o incluso como una transferencia definitiva, en función de las condiciones económicas y deportivas que más convenzan al jugador y su entorno.