El 3-3 entre el FC Barcelona y el Inter de Milán en el Estadi Olímpic Lluís Companys dejó una mezcla de emociones en el vestuario blaugrana y entre su afición. Por un lado, la euforia por una remontada llena de carácter tras un inicio adverso. Por otro, una inquietud táctica que ya empieza a condicionar el análisis de cara a la vuelta.
Si bien el equipo de Hansi Flick demostró una resiliencia admirable al igualar un 0-2 en contra, también quedó patente una carencia preocupante: la debilidad en el lateral izquierdo.
Una baja que condiciona la eliminatoria
La ausencia de Alejandro Balde, el joven lateral que se ha convertido en uno de los jugadores más rápidos y desequilibrantes del fútbol europeo, se notó más de lo que muchos esperaban.
Balde continúa recuperándose de su lesión. Aunque su evolución es positiva, sigue siendo duda para la vuelta en San Siro. El cuerpo técnico es cauteloso. No quiere forzar su reaparición y arriesgar una recaída que podría afectar no solo al desenlace de esta Champions League, sino también a su disponibilidad para la próxima temporada y la Eurocopa.
En la ida, Flick optó por soluciones de emergencia. Ninguna de ellas pudo igualar la velocidad y capacidad de recuperación defensiva que Balde ofrece. Y es precisamente esa falta de velocidad en el costado zurdo la que podría convertirse en un factor decisivo en el partido de vuelta.
David Bernabéu: una voz crítica y experimentada
El periodista David Bernabéu Reverter es una de las voces más autorizadas en el análisis del entorno blaugrana. Con una dilatada carrera en medios como SPORT, Gol TV, Movistar+ y colaboraciones en El Chiringuito de Jugones, Bernabéu se ha ganado el respeto por su capacidad para detectar los puntos críticos en el rendimiento del Barça.
Su enfoque combina el análisis táctico con una comprensión del contexto emocional y competitivo del club, lo que le ha convertido en una referencia para aficionados y profesionales del fútbol.
Dumfries: una amenaza por el carril derecho
En la ida, el neerlandés Denzel Dumfries fue un dolor de cabeza constante para la defensa del Barcelona. Su potencia y velocidad por el carril derecho desbordaron varias veces a los defensores que intentaron contenerlo.
Sin un lateral izquierdo de perfil natural y rápido, el Barça tuvo que ajustar su sistema para tapar las subidas de Dumfries, una tarea que se complicará aún más si Balde no llega a tiempo para el partido de vuelta. El temor es claro: si Dumfries tiene espacios, puede ser letal en el contraataque y generar superioridades que pongan en apuros al bloque defensivo de Flick.
El análisis de la prensa y las redes sociales
Tras el partido, tanto medios como aficionados coincidieron en señalar el problema en el lateral izquierdo como una de las claves de la eliminatoria.
Mundo Deportivo y Sport alertaron de la falta de velocidad defensiva en esa banda, mientras que en redes sociales el debate se encendió bajo etiquetas como #BaldeDuda y #ProblemaLateralIzquierdo.
Los culés expresaron tanto su preocupación como su esperanza en que Flick pueda encontrar una solución táctica para neutralizar la amenaza del Inter en ese sector del campo.
La reflexión de David Bernabéu que agitó el debate
Mientras el análisis táctico inundaba los platós de televisión y las redes sociales hervían con opiniones divididas, el comentario de David Bernabéu se convirtió en el punto de referencia para resumir el dilema blaugrana. Fue a través de su cuenta de Twitter (X) donde el periodista expresó, con claridad y sin rodeos, la preocupación que muchos compartían pero pocos se atrevieron a verbalizar tan directamente:
"El Barça, sin lateral izquierdo. Un drama para frenar a Dumfries. Sin Balde, nadie le compite en velocidad." Una frase breve pero contundente que puso el foco en el verdadero reto del Barça: no solo marcar en San Siro, sino evitar que Dumfries y compañía exploten una de las principales vulnerabilidades del equipo.
Un desafío que puede definir la eliminatoria
El FC Barcelona no solo deberá buscar el gol en Milán. Antes que nada, necesitará resolver el problema del lateral izquierdo. La disponibilidad de Balde podría ser clave. Si no llega, Flick tendrá que recurrir a una solución táctica que frene el potencial de Dumfries y mantenga vivas las opciones de alcanzar la final.