Pablo Torre padecía una fractura en el quinto metacarpiano de su mano izquierda. Sin embargo, las últimas noticias son alentadoras: el centrocampista regresará a los entrenamientos la próxima semana tras una exitosa intervención quirúrgica en la mañana de este jueves. Esta buena nueva supone que el joven centrocampista podrá ser partícipe de la gira que el Barça realizará en los Estados Unidos a partir del día 28 de julio.
Pablo Torre, promesa del Barça, sufrió la lesión durante un entrenamiento reciente. Fue sometido a una operación que se llevó a cabo "bajo la supervisión de los servicios médicos del club y dirigida por el doctor Xavi Mir", tal y como informaba el Barça en un comunicado oficial. El procedimiento fue un éxito y ahora Torre se prepara para un breve período de reposo de 4-5 días antes de reincorporarse progresivamente a las sesiones de entrenamiento.
El ex del Racing de Santander es el séptimo futbolista que estará habitando la sobrepoblada enfermería culé. Se sumará a Pedri y Araujo, lesionados en los recién terminados campeonatos continentales de selecciones, y los que ya arrastran dolencias desde el pasado curso. Son Gavi, De Jong, Balde y Julián Araujo.
Los planes del Barça con Pablo Torre
Si bien es cierto que, de primeras, Hansi Flick sospecha que el cántabro será uno de los descartes, en la pretemporada tendrá la oportunidad de hacer cambiar de opinión al teutón. Si no lo logra, las últimas informaciones apuntan a que en el seno del Barça le buscarán otra cesión para que pueda prolongar su proceso de curtimiento.
De hecho, ya estuvo cedido el pasado curso en el Girona, aunque no tuvo la relevancia que se esperaba. Con 26 apariciones y un gol, dejó una buena impresión pero no logró consolidarse como titular indiscutible. Y, por otro lado, la medular azulgrana padece de overbooking, por lo que parece altamente complejo que pueda hallar un hueco.
Su contrato con la entidad catalana vence en junio del 2026, por lo que a Pablo Torre se están acabando las oportunidades de demostrar su valía para vestir de azulgrana. Llegó en 2021, pero en su primer año fue el último en discordia para Xavi Hernández y en el segundo, como decíamos, no terminó de brillar en Montilivi. Ahora, en caso de no convencer a Flick, club y jugador deberán buscar un equipo el que disponga de muchas más garantías de minutos.