Esta semana se iniciarán en el Parlament de Catalunya los procedimientos que establece el Reglamento y que darán el pistoletazo de salida a la XV Legislatura. Los nuevos diputados de Aliança Catalana, Sílvia Orriols por Girona y Ramon Abad por Lleida, recogerán el acta que les acredita como diputados de la formación "aliada", que acabará integrada en el Grupo Mixto.
La formación encabezada por la alcaldesa de Ripoll se ha mantenido este fin de semana al margen del debate público sobre la investidura de los dos candidatos que han manifestado querer ser investidos Presidente de la Generalitat: por un lado Salvador Illa (PSC), ganador de las elecciones, y por otra parte el expresidente Carles Puigdemont (Junts).
Será pues esta semana que Silvia y Ramon tendrán que presentar en la Secretaría General del Parlamento la documentación requerida para acreditar su elección y que ya ha sido proporcionada por las respectivas Juntas Electorales de Zona. Hecho esto, facilitarán su declaración de actividades y bienes, para, finalmente, tomar posesión del cargo en una sesión pública donde deben prestar juramento o promesa de respetar la Constitución española y el Estatuto de Autonomía de Cataluña.
Juramento o promesa por imperativo legal
Es muy probable que los diputados aliados utilicen la fórmula tan conocida del «bajo imperativo legal» que se utiliza cuando se jura o se promete algo intangible o resulta una mera declaración de intenciones sin efectos prácticos. Es imprescindible para acceder a cualquier cargo público y hay que recordar que Silvia es alcaldesa de Ripoll, y que por tanto, su tratamiento protocolario será el de Ilustrísima Diputada dado que ya goza de la condición de cargo público y ya ha prestado estas obligaciones.
Si esto no fuera suficiente, aquí es donde entra en juego la llamada Declaración de tolerancia cero del Parlament de Catalunya, a la que también tendrán que hacer frente los diputados aliados esta semana, ya que se indicará en su ficha de diputado/ da de la web del Parlamento si ha sido firmada o no. Esta Declaración, según la última nota de prensa del Parlament relativa al resultado de las elecciones y publicada el 13 de mayo, indica que se trata de un compromiso institucional para combatir la discriminación y el acoso dentro de la organización, es decir , el Parlamento de Cataluña.
Este compromiso, enmarcado en el Plan de igualdad de género, busca garantizar un entorno laboral libre de sexismo y discriminación, incluyendo la LGTBI-fobia. Se especifica también que los diputados deben firmar este compromiso para demostrar su adhesión a estos valores y asegurar una conducta adecuada y respetuosa hacia todos los miembros de la institución.
Una normativa irrelevante creada por 3 precedentes en partidos procesistas
Se añade que si no se firma se hará público por los propios servicios de la cámara en la ficha de los diputados disponible en Internet. El principal problema es que la declaración que se obliga a firmar públicamente no está disponible en la web del Parlamento y, por la formulación del sitio web, parece pertenecer a la XIII Legislatura. Esto será un foco de críticas públicas esta semana ─y las generará─ tanto si Silvia Orriols y Ramon Abad firman como si no esta susodicha Declaración de tolerancia cero.
Es importante recordar que, si se obliga a prometer la Constitución Española, que es la norma suprema del Reino aparte del Estatut de Catalunya para acceder a la condición de diputado, cualquier reiteración normativa menor no procede.
Además, sorprende que se obligue a Sílvia Orriols y Ramon Abad a firmar un protocolo por acoso sexual cuando los únicos incidentes pasados con diputados que se han excedido, y para los que se ha redactado la declaración, han sido de Junts ( Pujol), ERC (Salvadó) y especialmente la CUP (Arrufat). Aliança Catalana no debería firmar este protocolo, pero sí debería exigir a Junts, ERC y la CUP que lo firmen.