Las elecciones españolas de mayo de 2023 dejaron la gobernabilidad del Estado español en manos de Junts per Catalunya y de ERC. Los partidos procesistas exigieron a Pedro Sánchez y a Yolanda Díaz que si querían formar gobierno tenían que aprobar la Ley de Amnistía, además de permitir hablar catalán en el Congreso de los Diputados y en el Parlamento Europeo.
Carles Puigdemont y los suyos lo vendieron como un gran logro, como una "jugada maestra", hablando lenguaje procesista. Una victoria que, dijeron, permitiría a los exiliados volver a casa y repararía los daños y perjuicios causados a todos los represaliados. Un año más tarde, la Ley ha visto la luz verde del Congreso de los Diputados y está pendiente su publicación en el BOE.
La Ley ha sido muy criticada por el Partido Popular, hasta el punto que Alberto Núñez Feijóo se ha venido arriba y ha propuesto una moción de censura a Pedro Sánchez con la ayuda de VOX y de Junts. Para el PSOE, Sumar y los autonomistas es un logro y un paso adelante en la convivencia. Una convivencia dentro de un estado autonómico, como es lógico.
Juristas independentistas critican la Ley
El candidato que ocupaba el número 2 en la lista de Girona, Jordi Coma, ha publicado un vídeo en redes sociales en el que critica la aprobación de la Ley. Lo considera un nuevo engaño al pueblo de Catalunya, al que se ha vendido la medida como un pulso al Estado. No obstante, lo cierto es que el Estado ha vuelto a ganar, porque a partir de ahora consigue una "normalización" del escenario político.
En este sentido, Jordi Coma nos invita a buscar la Ley y a leer la exposición de motivos. El título es Ley Orgánica de amnistía para la normalización institucional, política y social en Cataluña. Es decir, la Ley de amnistía tiene que servir para "normalizar" la situación. Consideran entonces las partes que antes no era "normal". Consideran los firmantes de la Ley que convocar un referéndum legal y que vinculante no era "normal". Igualmente consideran las partes que someterse a los tribunales españoles también es "normal".
La publicación de Jordi Coma se ha hecho viral en redes sociales y muchos catalanes han contestado, dándole las gracias por sus palabras.