Nos encontramos en los últimos días de otoño y, con ello, el frío comienza a hacer sus primeros actos de presencia. Durante este fin de semana, ya hemos podido ver como varias localidades se han teñido de blanco ante la caída de altas cotas de nieve, alcanzando incluso los 30 centímetros. Y si bien es cierto que esta Borrasca de nombre Darragh se marchará ya de nuestro territorio durante la jornada vespertina del lunes, el peligro no ha pasado.
Como decíamos, a lo largo del día de hoy se sigue esperando que caiga algo de nieve en Catalunya, especialmente en el tercio norte, donde incluso se ha establecido la alerta roja durante el fin de semana. Eso sí, por la tarde ya nos estableceremos en una tendencia de subida de temperaturas que se alargará toda la semana. A causa de ello, el hielo desaparecerá y podremos tener unos días de cierta tregua meteorológico.
En muchas otras localidades del territorio español, de hecho, han vivido también días intensos con la nieve, especialmente en Soria y Burgos. Pero habrá que estar alerta porque, según el joven meteorólogo Jorge Rey, a partir del próximo domingo podría aterrizar en el norte peninsular una nueva borrasca. Con ella, podrían llegar heladas todavía más fuertes que las de este fin de semana acompañadas también de lluvias intensas.
Y por si esto fuera poco, Jorge Rey también ha anunciado que las cabañuelas empiezan a predecir situaciones climatológicas extremas para dentro de un mes, aproximadamente. En este orden de ideas, es importante mantenerse alerta en todo momento y, sobre todo, revisar las previsiones temporales y obedecer a las recomendaciones de las autoridades.
Si las cabañuelas lo dicen...
Jorge Rey, joven meteorólogo conocido por sus acertadas predicciones climáticas, utiliza el método tradicional de las cabañuelas para prever el tiempo. Este sistema, empleado durante siglos, tiene su origen en la observación meticulosa de la naturaleza y los fenómenos atmosféricos durante los primeros días del año. Aunque no es una técnica científica en el sentido moderno, ha ganado popularidad por su capacidad para anticipar patrones meteorológicos a largo plazo.
El método consiste en analizar las condiciones meteorológicas de los 12 primeros días de enero, cada uno representando un mes del año. Así, el 1 de enero correspondería a enero, el 2 a febrero, y así sucesivamente. También se complementa con la observación inversa durante los días posteriores (del 13 al 24 de enero), llamados "retornadas", que sirven para confirmar o ajustar las predicciones iniciales.
Jorge Rey no solo sigue este sistema tradicional, sino que lo complementa con datos actuales de modelos meteorológicos y su propia interpretación. Según el joven meteorólogo, las cabañuelas permiten identificar tendencias generales, como sequías o lluvias prolongadas, aunque su precisión para detalles concretos es limitada.
A pesar de las críticas de la comunidad científica, que considera este método poco riguroso, las cabañuelas siguen despertando interés en la sociedad. La combinación de tradición y nuevas tecnologías que aplica Jorge Rey ha contribuido a popularizar esta técnica ancestral en el mundo moderno.