Una bandera ondeando al viento junto a una sirena roja sobre un cielo azul con nubes.

Giro de 180 grados con el tiempo después de la Cabalgata de Reyes

El Meteocat lo ha hecho oficial

Las fiestas navideñas se despiden con un golpe de efecto meteorológico. Tras vivir varios días con temperaturas en ascenso y un ambiente más suave de lo habitual para esta época del año, la previsión del Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) augura un cambio brusco que se hará notar justo después de la tradicional Cabalgata de Reyes. Según los últimos mapas, un frente se acerca desde el noroeste y podría traer precipitaciones en el cuadrante nordeste, e incluso nevadas en cotas altas, en especial durante la festividad del 6 de enero.

Un breve respiro… antes de la inestabilidad

La jornada del domingo —coincidiendo con la Cabalgata de Reyes en muchas poblaciones— podría empezar con un ambiente relativamente estable en buena parte del territorio. El Meteocat, no obstante, destaca la posibilidad de bancos de niebla matinales en zonas del interior y prelitoral, que tenderán a disiparse a lo largo de la mañana. Las temperaturas, tanto mínimas como máximas, seguirán manteniéndose por encima de la media invernal, al menos durante la primera mitad del día.

Cabalgata de Reyes Magos en 2024
Cabalgata de Reyes Magos en 2024 | Ajuntament de Barcelona

Donde sí se podría notar algo más de nubosidad será en el Pirineo occidental y, puntualmente, en áreas del extremo norte, lo que servirá de anticipo al cambio de tiempo que llegará con el nuevo frente. Según los datos meteorológicos, la inestabilidad irá ganando terreno conforme avance la tarde y podrían registrarse los primeros chubascos débiles en el litoral norte, aunque todavía sin episodios destacables.

El Día de Reyes, marcado por la nieve en cotas altas

Tal y como adelanta el Meteocat, la llegada del frente se hará sentir de lleno a partir del lunes. Para el Día de Reyes (6 de enero), se esperan lluvias que podrían afectar sobre todo al cuadrante nordeste de Catalunya, mientras que en zonas del Pirineo o Prepirineo la cota de nieve bajará lo suficiente como para dejar nevadas en cotas relativamente altas —por encima de los 1.500-1.600 metros, con tendencia a descender localmente—.

No se descartan algunas precipitaciones en áreas cercanas al Ebro y la meseta central catalana, aunque en principio serían más moderadas.

Este giro de 180 grados obliga a quienes viajen o tengan pensado realizar actividades al aire libre a revisar la previsión a diario, especialmente si se atraviesan zonas de montaña.

Lluvia intensa en un patio con una silueta de Cataluña con la bandera catalana en primer plano.
Montaje con una imagen de lluvia con un mapa de Catalunya a la izquierda | IPGGutenbergUKLtd, mick1980, XCatalunya

El organismo meteorológico insiste en extremar las precauciones en carreteras de alta cota, donde el asfalto podría verse comprometido por nevadas repentinas o la presencia de hielo.

De la suavidad al ambiente plenamente invernal

El cambio brusco podría afectar, además de a las precipitaciones, a la sensación térmica, puesto que se prevé que las temperaturas máximas experimenten un descenso moderado. No se descarta, sin embargo, que las mínimas continúen mostrando un comportamiento dispar en función de la nubosidad y de la ubicación geográfica. Mientras algunas comarcas seguirán librándose de heladas importantes, otras zonas interiores verán cómo se intensifican los valores negativos al caer la noche.