Hace siete años, se vivieron unas jornadas históricas en el Parlament. El 8 de septiembre de 2017 vivimos un primer capítulo de lo que luego se convertiría en un engaño y una farsa. La Cámara catalana, con su mayoría supuestamente independentista, aprobaba las llamadas leyes de desconexión, una ley de transitoriedad que nos tenía que llevar a la República Catalana.
Un mes más tarde, el 10 de octubre de 2024, el President Carles Puigdemont, leía los resultados del referéndum de independencia celebrado el 1 de octubre y declaraba la independencia. Una independencia que estuvo vigente durante 8 segundos, pero que luego quedó en suspendida, porque el president invitó al Estado a negociar y porque pecó de ingenuidad cuando pensó que la Unión Europea aprobaría la medida. Eran otros tiempos, tiempos de 'Europa nos mira' y de 'jugadas maestras'.
7 años después: ni rastro del movimiento independentista
Siete años después, no queda nada de ese momento. Junts, ERC y CUP se han convertido en partidos procesistas y los ciudadanos se han cansado de mentiras y se han sentido engañados. El destino ha querido que siete años después, concretamente, el 10 de octubre de 2024, Junts, ERC y la CUP rechazaran reactivar la independencia.
Lo hicieron durante una sesión de control al president Salvador Illa. Un trámite habitual en un Parlament autonomista. De los 133 diputados presentes, 95 noes, 3 síes y 35 abstenciones. Los noes son de PSC, VOX, PP, Comuns, ERC y CUP. Las abstenciones son de Junts per Catalunya y los 3 diputados que votaron sí son los de Aliança Catalana y el de Joan Garriga de VOX, que se equivocó y votó a favor de la propuesta de resolución. Así lo explicó el dirigente de Aliança Catalana, Lluís Areny:
El reparto del Parlament queda claro y la imagen de colores verdes, rojos y naranjas (abstenciones) es muy gráfica. Con la salvedad del voto erróneo, que no cambia las mayorías, el Parlament se divide entre españolistas, procesistas e independentistas.
El único partido independentista es Aliança Catalana. El partido procesista es Junts per Catalunya, que actualmente tiene 35 diputados, los que votaron por la abstención. Y la suma de votos contrarios a la independencia son los de PSC, PP, VOX, Comuns, ERC y CUP. Sí, sí, lo habéis leído bien. ERC y CUP votaron en contra de la propuesta de resolución de Aliança Catalana. No hay que correr riesgos y que se ponga en peligro algún pacto oculto entre ERC y Ñ que ponga en peligro la amnistía y que Oriol Junqueras retome su vida política.