Dos personas sentadas en un sofá viendo una pantalla de televisión con el logotipo de Netflix en un ambiente acogedor con paredes de ladrillo.

Confirmado: Los televisores en los que ya no podrás ver Netflix

La modernización del servicio de streaming puede afectar a tu dispositivo

Netflix ha sido líder en el mercado del streaming desde su creación. Su catálogo variado ha conquistado millones de hogares. En España, su presencia es notable, consolidándose como la opción favorita frente a sus competidores.

Sin embargo, la plataforma no está exenta de polémicas. Cambios recientes, como la limitación de cuentas compartidas, generaron críticas. Pese a ello, la empresa mantiene su posición dominante, con un 43,4% de penetración en los hogares.

La constante evolución tecnológica también ha marcado su camino. Actualizaciones frecuentes buscan mejorar la experiencia del usuario, pero no todos los dispositivos son compatibles.

A partir del 1 de diciembre, Netflix dejará de ser compatible con televisores fabricados antes de 2014. La empresa ha tomado esta decisión para optimizar sus servicios y ofrecer funciones más modernas.

Una mano sostiene un control remoto frente a una pantalla de televisión que muestra el logotipo de Netflix.
Un televisor con Netflix | Getty Images

Televisores antiguos: sin Netflix a partir de diciembre

Según la compañía, los televisores fabricados antes de 2014 ya no podrán acceder a la plataforma por limitaciones de hardware y software. Estas televisiones no soportan las actualizaciones necesarias para el funcionamiento de la aplicación, lo que afecta directamente a la experiencia del usuario.

La medida, aunque polémica, está enfocada en garantizar la compatibilidad con tecnologías actuales. Netflix explica que los sistemas de software requeridos por la plataforma no son compatibles con los modelos antiguos.

Esto incluye actualizaciones que mejoran la calidad de imagen, velocidad de carga y otras funciones avanzadas. La decisión refleja el esfuerzo de Netflix por mantenerse a la vanguardia en un sector cada vez más competitivo. Además, esta medida forma parte de una estrategia más amplia para modernizar la plataforma.

Desde Netflix señalan que implementar estas actualizaciones es clave para ofrecer una experiencia adaptada a los estándares tecnológicos del mercado. Aunque esto puede ser un inconveniente para algunos usuarios, asegura el uso de funciones más avanzadas y servicios optimizados.

¿Qué hacer si tu televisor no es compatible?

Si tu televisor está afectado por esta medida, no necesariamente tendrás que comprar uno nuevo. Hay alternativas accesibles que permiten seguir disfrutando de Netflix sin necesidad de cambiar tu televisor.

La primera opción es utilizar dispositivos de streaming como Amazon Fire Stick, Google Chromecast o Roku. Estos pequeños aparatos, que se conectan directamente al televisor, convierten cualquier modelo en "inteligente", permitiendo instalar aplicaciones de streaming de forma sencilla.

Estos dispositivos incluyen sistemas operativos que facilitan la navegación y suelen venir acompañados de mandos a distancia. Además, son económicos y muy fáciles de configurar. Incluso si tu televisor no es compatible con las actualizaciones más recientes, estos dispositivos aseguran que puedas seguir disfrutando de Netflix y otras plataformas similares.

Otra alternativa práctica es conectar un ordenador al televisor mediante un cable HDMI. Este método, aunque más rudimentario, permite transmitir directamente el contenido del ordenador al televisor. Es una solución efectiva para quienes buscan una opción rápida y sin necesidad de comprar dispositivos adicionales.

El futuro del streaming: ¿Qué podemos esperar?

La decisión de Netflix refleja una tendencia general del sector tecnológico: priorizar la innovación y la calidad de los servicios. A medida que las plataformas de streaming evolucionan, buscan incorporar nuevas funciones.

Como mejoras en la resolución, inteligencia artificial para recomendaciones personalizadas y tiempos de carga más rápidos. Todo esto requiere dispositivos más avanzados que puedan soportar estas tecnologías.

Por otro lado, esta medida también subraya el desafío de equilibrar la modernización con las necesidades de los usuarios. Aunque es lógico que los avances tecnológicos dejen atrás dispositivos más antiguos. Esta transición debe ser comunicada de manera clara para evitar frustraciones entre los usuarios afectados.