Una agente de policía de espaldas en una carretera con un lazo negro en señal de luto.

Trágico accidente en la C-16c: atropello en la calzada

Los hechos tuvieron lugar el día de ayer a primera hora de la noche

Un nuevo siniestro ha estremecido las carreteras catalanas, elevando a 34 las víctimas mortales en lo que llevamos de 2025, según datos provisionales facilitados por el Servei Català de Trànsit. El incidente, ocurrido este jueves por la noche, pone en relieve nuevamente la vulnerabilidad de los peatones en vías rápidas.

Los hechos del accidente

El pasado jueves 20 de marzo, alrededor de las 20:21 horas, se produjo un trágico accidente en el punto kilométrico 1,6 de la carretera C-16c. Según el informe preliminar ofrecido por el Servei Català de Trànsit, una mujer de 45 años y vecina de Manresa perdió la vida. Tras ser atropellada por dos turismos mientras cruzaba la vía en circunstancias que todavía están bajo investigación.

La rápida reacción de los servicios de emergencia no fue suficiente para salvar la vida de la víctima. Hasta el lugar se desplazaron cinco patrullas de los Mossos d'Esquadra, dos dotaciones de los Bomberos y una ambulancia del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM).

Ambulancias amarillas con la inscripción
SEM | SEM

La carretera permaneció cerrada temporalmente mientras se efectuaron las labores de emergencia. Y el tráfico fue desviado por una vía secundaria durante varias horas, generando afectaciones importantes en la movilidad de la zona.

Contexto preocupante: cifras alarmantes

Este triste suceso no es aislado y forma parte de una creciente problemática relacionada con la seguridad vial en Catalunya. Hasta la fecha, 34 personas han perdido la vida en accidentes en las carreteras catalanas en este 2025. Una cifra preocupante que exige atención inmediata por parte de las autoridades y concienciación por parte de los ciudadanos.

A pesar de las campañas y controles frecuentes por parte del Servei Català de Trànsit, la mortalidad vial sigue siendo un desafío importante. En muchos casos, como el ocurrido en Sant Fruitós de Bages, son los peatones quienes se llevan la peor parte. Debido a la alta vulnerabilidad frente a los vehículos en vías rápidas y la dificultad para reaccionar a tiempo en situaciones imprevistas.

Las consecuencias

Este incidente debe servir como llamada de atención tanto a autoridades como a conductores y peatones. Las investigaciones posteriores deberán determinar las causas del atropello, pero mientras tanto, vuelve a ser indispensable recalcar la importancia de respetar los límites de velocidad. Aumentar la atención en las vías menos iluminadas y garantizar la seguridad de los peatones mediante la mejora de infraestructuras.

Desde el Servei Català de Trànsit han aprovechado para recordar que está disponible el SIAVT (Servei d'Informació i Atenció a les Víctimes de Trànsit). Que ofrece orientación, asistencia psicológica y apoyo informativo durante todo el año a las víctimas y familiares afectados por accidentes de tránsito.

La reflexión final gira en torno a la prevención. Cada vida perdida en la carretera podría haberse evitado con mejores medidas preventivas y mayor responsabilidad al volante y al caminar por lugares de riesgo. Es tarea conjunta de todos asegurar que noticias como estas sean cada vez menos frecuentes.