Lo que parecía una agradable mañana de inmersión submarina en una famosa zona turística catalana se ha convertido en tragedia este martes. Un submarinista extranjero, de 65 años, ha perdido la vida mientras realizaba una excursión para explorar los espectaculares fondos marinos que atraen cada año a miles de visitantes amantes del buceo.
La fatal inmersión cerca de las Islas Medas
El trágico suceso ha ocurrido poco después de las nueve de la mañana, cuando un grupo organizado por una empresa especializada en submarinismo iniciaba una habitual inmersión en la Costa Brava, concretamente cerca de las Islas Medas, en l'Estartit, Torroella de Montgrí (Baix Empordà). Según El Caso, el submarinista, de nacionalidad francesa, habría comenzado a mostrar dificultades durante el descenso y posteriormente no consiguió regresar a la superficie junto con el resto del grupo.
Al notar su ausencia, compañeros y guías alertaron inmediatamente a los servicios de emergencias. En pocos minutos llegaron patrullas de los Mossos d'Esquadra y de la Guardia Civil, así como sanitarios del SEM, quienes rápidamente activaron los protocolos de rescate submarino con la esperanza de localizar al hombre con vida. A pesar del esfuerzo realizado por el personal sanitario y los propios instructores de buceo, nada pudieron hacer para reanimarlo una vez recuperado del agua.

Investigación abierta para esclarecer lo ocurrido
La Guardia Civil, cuerpo encargado habitualmente de los incidentes marítimos, se ha hecho cargo de la investigación para determinar las circunstancias exactas que provocaron el fatal desenlace. Como parte de los procedimientos habituales, especialistas del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) analizarán el equipo utilizado por la víctima, especialmente las bombonas de oxígeno, para descartar cualquier posible fallo técnico o problema con los equipos proporcionados por la empresa organizadora.
Además,será fundamental la autopsia que se realizará en las próximas horas para confirmar si la muerte fue causada por un problema médico repentino, como podría ser un infarto o una embolia, o si se debió a complicaciones relacionadas con el propio buceo, como un error en los procedimientos o algún tipo de problema derivado de la presión submarina.
Antecedentes preocupantes en la Costa Brava
Este incidente mortal no es un caso aislado en las aguas de la Costa Brava. Justamente hace poco más de un año, un submarinista de 43 años procedente de Lleida perdió la vida cerca de Roses (Alt Empordà), también en circunstancias trágicas durante una inmersión. En aquella ocasión, el fallecimiento se debió a problemas derivados de una mala descompresión al subir demasiado rápido a la superficie, pese a los esfuerzos del equipo médico desplazado hasta el lugar.
El incremento de actividades submarinas en zonas turísticas como la Costa Brava, famosas internacionalmente por la belleza de sus fondos marinos, atrae cada año a miles de visitantes. Esto obliga a las autoridades y empresas del sector a mantener estrictos protocolos de seguridad y constantes revisiones del material utilizado para evitar en lo posible incidentes similares.