La soleada mañana de este miércoles transcurría de forma habitual en Vimbodí i Poblet (Conca de Barberà) hasta que, minutos antes de las once, los servicios de emergencia comenzaron a recibir llamadas que alertaban de un ruido seco, similar a un estallido, en las inmediaciones de la carretera TV-7004, a la altura del kilómetro 2. La alarma no tardó en extenderse entre los vecinos, muchos de los cuales percibieron el estruendo y, poco después, observaron una columna de humo elevándose en la distancia. De inmediato, varias dotaciones de los Bombers de la Generalitat se pusieron en marcha para atender lo que inicialmente parecía ser un incendio de carácter industrial.
Conforme fueron llegando los primeros equipos de Bomberos, se constató que el incidente se había producido en una caseta aislada dentro del recinto de la empresa Pirotècnica Catalana, dedicada a la fabricación y manipulación de productos pirotécnicos. El fuego, originado tras una explosión de material pirotécnico y pólvora, no solo afectó la construcción en la que se encontraban los trabajadores en ese momento, sino que también se propagó a unos 50 metros cuadrados de masa forestal.
Este hecho incrementó la complejidad de la actuación, obligando a las fuerzas de seguridad y a los servicios de emergencias a coordinar un doble frente: la extinción del incendio y la prevención de un posible mayor alcance de las llamas en un entorno natural seco. La magnitud de la emergencia quedó patente en la rápida movilización de medios. Un total de 12 dotaciones de los Bombers acudieron al lugar, incluyendo efectivos de distintos grupos especializados: el Grupo de Riscos Tecnològics (GRIT), el Grupo Operativo de Soporte (GROS) y el Grupo de Estructuras Colapsadas (GREC).
Paralelamente, el Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM) activó cinco ambulancias y dos helicópteros medicalizados para atender a las personas afectadas. Según la información oficial, tres trabajadores de la pirotécnica resultaron heridos de gravedad tras la explosión: dos de ellos, en estado muy grave, fueron trasladados al Hospital Vall d’Hebron de Barcelona, mientras que el tercero, con pronóstico grave, ingresó en el Hospital Joan XXIII de Tarragona.
Dos heridos de amplia gravedad
El alcalde de Vimbodí i Poblet, Joan Canela, se personó en la zona para seguir de cerca la evolución de los hechos y mantener informadas a las autoridades competentes. Según declaraciones suyas, los otros cuatro empleados de la pirotécnica se hallaban en casetas distintas y, por fortuna, resultaron ilesos. Esto se debe a la particular distribución de la empresa, que trabaja en varios habitáculos separados precisamente para minimizar daños en caso de accidentes relacionados con material explosivo.
Por su parte, las fuerzas de seguridad han activado los protocolos pertinentes. La Unidad de Investigación de la comisaría de Valls de los Mossos d’Esquadra abrirá diligencias, considerándolo un posible accidente laboral. Se notificará al Departament de Treball, encargado de supervisar que se cumplan las medidas de seguridad exigidas por la normativa.
Además, la Guardia Civil, con competencias en explosivos, llevará a cabo una inspección en las instalaciones para cerciorarse de que la empresa no haya incumplido los protocolos exigidos en la manipulación de pólvora y artículos pirotécnicos. Al mismo tiempo, desde Protecció Civil se activó en un primer momento la alerta del Plan de emergencia exterior del sector químico en Tarragona (PLASEQTA), en prevención de daños o riesgos adicionales.
Sin embargo, esta prealerta fue desactivada hacia las 13.30 horas, en vista de que el incendio se dio por controlado y se constató que no existía amenaza inmediata para el entorno. Los bomberos lograron contener las llamas en la zona forestal, evitando que se propagaran a otras casetas o a una superficie boscosa mayor. No obstante, parte del dispositivo se mantuvo en el lugar para garantizar que el fuego quedara completamente extinguido y para enfriar los restos de material pirotécnico aún susceptibles de calentarse y provocar nuevas reacciones.
La investigación para determinar las causas exactas de la explosión continúa abierta. Por el momento, la principal prioridad es la recuperación de los heridos, cuya gravedad pone de manifiesto la peligrosidad inherente a esta clase de industrias. Mientras se esclarecen los hechos, la empresa Pirotècnica Catalana ha activado su propio plan de emergencias y evacuado a todos sus trabajadores, un total de seis, incluidos los tres heridos. Las labores de los distintos cuerpos de seguridad e intervención se prolongarán hasta que se considere seguro el recinto y se haya verificado la integridad del resto de casetas.