Mientras la AP-7 protagoniza el gran accidente del día en Catalunya, la C-58 no se queda atrás. Esta importante arteria de comunicación ha vuelto a colapsar debido a un nuevo incidente en el mismo punto que ya causó problemas el pasado domingo. Este tipo de situaciones evidencian la importancia de planificar desplazamientos teniendo en cuenta el estado del tráfico.
Según ha informado el Servei Català de Trànsit, un camión averiado ha obligado a cortar un carril en la C-58, a la altura de Ripollet. El incidente se ha producido en sentido nord hacia Sabadell y ha generado 2,5 kilómetros de retenciones desde Montcada i Reixac. La imagen compartida por Trànsit muestra una fila de vehículos prácticamente detenidos, dificultando la fluidez en esta transitada vía.
Este nuevo contratiempo llega tan solo tres días después de un accidente múltiple ocurrido en el mismo punto de la C-58. El domingo, una colisión entre varios vehículos dejó tres heridos, uno de ellos en estado grave. Las retenciones en aquella ocasión se prolongaron durante toda la mañana, complicando los desplazamientos de numerosos conductores.
Accidentes habituales en la C-58
La C-58 es una de las carreteras más transitadas de Catalunya, conectando Barcelona con importantes ciudades del Vallès Occidental como Sabadell y Terrassa. Su saturación frecuente, especialmente en horas punta, la convierte en un punto crítico del tráfico catalán. La densidad de vehículos, sumada a incidentes como el de hoy, genera situaciones de caos que afectan tanto a conductores como a servicios de emergencia.
Informarse del estado del tráfico antes de salir se presenta como una medida esencial para evitar estos colapsos. Aplicaciones móviles y actualizaciones en tiempo real, como las del Servei Català de Trànsit, ofrecen herramientas útiles para planificar rutas alternativas. En el caso de la C-58, opciones como la AP-7 o la carretera N-150 pueden aliviar los problemas, siempre que las condiciones lo permitan.
Los repetidos incidentes en la misma zona de la C-58 plantean la necesidad de estudiar medidas preventivas para evitar colapsos futuros. Desde una mejor señalización hasta el refuerzo de patrullas de tráfico, cualquier solución sería bienvenida para minimizar las interrupciones. Mientras tanto, los conductores deben extremar precauciones en esta carretera y optar por rutas alternativas si es posible.
El camión averiado que hoy ha colapsado la C-58 se suma a una larga lista de incidentes en una de las vías más críticas de Catalunya. Las autoridades instan a los conductores a mantenerse informados y a tener paciencia mientras se resuelve la situación. Con el tráfico de vuelta a la normalidad como objetivo, la vigilancia y precaución se vuelven más necesarias que nunca.