Incendio en planta de residuos en Orís

Los Bomberos no dan abasto: 3 brutales incendios en las últimas horas

El riesgo de incendios forestales sigue creciendo con el paso de los días

Durante la pasada madrugada y primeras horas del día, la actividad de los servicios de emergencia ha sido frenética. Un escenario en el que la velocidad de respuesta y la coordinación se han convertido en elementos clave para evitar males mayores. Lejos de ser una jornada tranquila, los equipos de extinción han visto multiplicarse las alertas por incendios en cuestión de pocas horas, obligando a desplegar numerosos efectivos en distintos puntos.

El fenómeno de los incendios simultáneos no es nuevo, pero lo que ha ocurrido en las últimas horas pone de manifiesto el alto riesgo que afronta el territorio en pleno inicio del verano. Las altas temperaturas y la sequedad del terreno se convierten en el caldo de cultivo perfecto para que las llamas se propaguen rápidamente, complicando el trabajo de los bomberos y exigiendo la máxima eficacia en cada intervención.

Incendio en Manresa: dos avisos y hectáreas calcinadas

El primer gran sobresalto de la jornada llegó de madrugada, cuando los bomberos recibieron una llamada alertando de un incendio próximo a una carretera secundaria. La rápida propagación del fuego  se llevó por delante una ha de rastrojo y paja en un campo segado situado junto a la carretera BV-1345, en las inmediaciones del campo del Gimnàstic. El aviso se registró alrededor de las 00:25 h, y en pocos minutos, varias dotaciones se desplazaron hasta el lugar para intentar controlar la situación.

Incendio en Manresa
Incendio en Manresa | @bomberscat

Sin embargo, apenas unas horas después, los equipos de emergencia tuvieron que actuar de nuevo en la misma zona. Un nuevo foco, detectado a las 04:48 h, arrasó cerca de 5.000 ha de rastrojo, esta vez en la parte trasera del campo del Gimnàstic. El despliegue de medios fue considerable para intentar frenar el avance de las llamas y evitar que el fuego alcanzase zonas habitadas o infraestructuras críticas.

La simultaneidad de ambos sucesos y la cercanía entre ellos evidencian la dificultad de combatir estos incendios en campos secos, donde cualquier chispa puede tener consecuencias devastadoras. La acción rápida y coordinada de los bomberos permitió extinguir ambos fuegos y evitar daños personales o materiales de mayor gravedad, aunque el impacto sobre el terreno es más que evidente.

Fuego en una planta de residuos de Orís

Mientras los bomberos trabajaban a contrarreloj en Manresa, otra alarma se activaba en el municipio de Orís, donde se declaró  un incendio en una planta de tratamiento de residuos  cercana a la zona de les Sales. En este caso, el aviso se produjo poco después de las 04:14 h, obligando a desplazar dos dotaciones y una máquina retroexcavadora que resultó clave en las tareas de extinción.

El fuego consumió cerca de 400 metros cuadrados de basura acumulada en la planta, generando una densa humareda y complicando el acceso a algunas áreas del recinto. Gracias al trabajo conjunto de los equipos humanos y el apoyo de la maquinaria pesada, fue posible remover los residuos y cubrirlos con tierra para sofocar por completo las llamas. Esta actuación resultó esencial para evitar que el incendio se propagara a zonas próximas, minimizando así el riesgo ambiental.

Vegetación forestal en Ulldemolins: el peligro de los rayos

El tercer gran incendio del día se produjo en una zona boscosa de Ulldemolins, donde el fuego afectó principalmente a sotobosque y vegetación de baja altura. El aviso se recibió poco antes del mediodía (11:24 h) y, aunque el incendio se mantuvo en baja intensidad, la intervención de los bomberos fue fundamental para evitar que se descontrolara.

La presencia de un helicóptero, que realizó varias descargas de agua y una inspección aérea, fue clave para asegurar que no quedaran focos activos. Según informaron los equipos desplazados, la causa más probable del incendio fue la caída de rayos en la jornada anterior, un fenómeno habitual en esta época y que suele provocar numerosos incendios en áreas forestales.