Un coche negro con una trampa para ruedas en una zona rural junto a un edificio amarillo y señales de tráfico

La lía en la A-2 superando ampliamente el límite de alcohol: Detenido

El coche que conducía el infractor ha sido inmovilizado por los Mossos d'Esquadra

Un final de agosto que podría haber acabado en tragedia fue evitado por una intervención policial. La tranquilidad de la mañana del domingo se vio abruptamente interrumpida por la conducta de un conductor.

Este individuo generó una situación de máximo riesgo en una de las principales arterias de comunicación del país. Su comportamiento irresponsable puso en grave peligro la vida de otros usuarios de la vía. Afortunadamente, la actuación de las autoridades consiguió neutralizar la amenaza antes de que se produjeran consecuencias irreparables.

El cúmulo de infracciones cometidas por una sola persona resulta alarmante y difícil de asimilar. Los agentes se encontraron con un escenario que iba mucho más allá de un simple despiste al volante. La cadena de imprudencias demostraba un desprecio absoluto por la seguridad propia y la de los demás. La detención del sujeto fue el desenlace inevitable a una serie de decisiones extremadamente peligrosas.

Un coche de policía y una ambulancia están estacionados en una calle con varios agentes, mientras una sirena roja de gran tamaño aparece editada sobre la imagen.
Los Mossos d'Esquadra durante una investigación | ACN, XCatalunya, Getty Images Signature: gdagys

Un cóctel de imprudencias al volante

Los hechos tuvieron lugar en la autovía A-2 a su paso por la comarca leridana del Segrià. Fueron varios los conductores que alertaron a los servicios de emergencia sobre un vehículo circulando en sentido contrario.

La patrulla de los Mossos d'Esquadra que acudió al aviso localizó rápidamente el coche infractor. Los agentes procedieron a darle el alto para identificar a su conductor y evaluar la situación. El hombre presentaba evidentes síntomas de encontrarse bajo los efectos del alcohol.

La posterior prueba de alcoholemia confirmó las sospechas de los policías de manera contundente. El dispositivo arrojó una tasa de 0,86 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. Esta cifra representa más del triple del límite máximo permitido por la ley, fijado en 0,25 mg/l.

La policía autonómica catalana informó de la detención a través de sus canales oficiales este mismo domingo 31 de agosto. El arresto se produjo por un presunto delito contra la seguridad del tráfico.

Un vehículo en situación irregular

Las sorpresas para la patrulla de los Mossos d'Esquadra no terminaron con la conducción temeraria y el positivo en alcohol. Al proceder con la identificación del vehículo, los agentes descubrieron varias irregularidades administrativas muy graves. El coche, un Ford Focus de color oscuro, carecía del seguro obligatorio para poder circular legalmente. Esta falta supone un grave problema en caso de accidente, dejando desprotegidas a las posibles víctimas.

Además, el automóvil no contaba con la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en vigor. Esta inspección es fundamental para garantizar que los vehículos cumplen con las condiciones mínimas de seguridad. Las fotografías compartidas por el cuerpo policial muestran el coche con serios desperfectos en su parte delantera.

En concreto, la rueda delantera izquierda aparece completamente destrozada, lo que evidencia un posible impacto previo. Circular en ese estado constituía un peligro añadido para todos los usuarios de la autovía A-2.

Una furgoneta de los Mossos d'Esquadra estacionada en una calle frente a un edificio.
Furgoneta de los Mossos d'Esquadra | ACN

Las consecuencias de una conducción criminal

El conductor detenido se enfrenta ahora a un panorama judicial y administrativo realmente complicado. La suma de sus acciones podría acarrearle consecuencias muy severas por las infracciones cometidas. Penalmente, será investigado por dos delitos distintos contra la seguridad vial. Uno por conducir con una tasa de alcohol considerada delictiva y otro por conducción manifiestamente temeraria. Ambos delitos pueden acarrear penas de prisión, multas económicas elevadas y la retirada del permiso de conducir.

Por otro lado, las faltas administrativas también supondrán sanciones económicas importantes para el infractor. Circular sin seguro y sin la ITV en regla conlleva multas que pueden sumar miles de euros. Este suceso pone de manifiesto la importancia de los controles policiales en las carreteras.

La rápida intervención de los Mossos d'Esquadra fue clave para sacar de la circulación a un individuo que era una bomba de relojería. Se evitó así un siniestro vial de consecuencias potencialmente devastadoras en una vía de alta capacidad.