Bomberos trabajando en la cafetería de Manresa

Incendio en máquina de café provoca el pánico: Intervienen 4 dotaciones de bomberos

Se han llevado un gran susto en una cafetería de Manresa

Los accidentes peligrosos pueden ocurrir en cualquier momento y en los lugares más inesperados, dejando poco margen para reaccionar. En locales comerciales o lugares concurridos, los incidentes menores pueden convertirse rápidamente en situaciones de riesgo para todos los presentes. Por ello, estar preparado y contar con medidas de seguridad adecuadas es fundamental para prevenir consecuencias mayores.

Este martes por la mañana, el susto llegó al centro de Manresa, cuando un incendio sorprendió a los empleados y clientes de un local en la céntrica calle Muralla de Sant Domènec. El fuego se originó alrededor de las 08:48 de la mañana en la máquina de café del establecimiento, afectando también la barra del local. La rápida propagación del humo y las llamas generó pánico en el lugar y obligó a evacuar tanto el local como el piso superior.

Según informaron los Bombers de la Generalitat, al lugar del incidente se desplazaron cuatro dotaciones de bomberos para controlar la situación. "El fuego está completamente extinguido", anunciaron a través de un comunicado en sus redes sociales. Sin embargo, la magnitud del humo afectó gravemente el establecimiento y se extendió al piso superior, que tuvo que ser ventilado de manera exhaustiva.

Una intervención clave para evitar daños mayores

La rápida actuación de los bomberos fue crucial para evitar que el incendio se propagara a otras áreas del edificio o locales cercanos. El equipo de emergencia logró sofocar las llamas en poco tiempo, evitando que el susto se convirtiera en una tragedia mayor. A pesar de ello, los daños en el local afectado son notables, especialmente en la zona de la barra, donde comenzó el incendio.

El incidente también puso de manifiesto la importancia de  contar con sistemas de prevención de incendios y procedimientos de evacuación claros en locales comerciales. El incendio generó gran expectación entre los vecinos y transeúntes que se encontraban en la zona. Muchos presenciaron la llegada de los camiones de bomberos y el despliegue del operativo, que cortó temporalmente el tráfico en la calle Muralla de Sant Domènec. Los residentes del edificio afectado también tuvieron que abandonar sus viviendas mientras se realizaban las labores de extinción y ventilación.

Afortunadamente, no se reportaron heridos ni intoxicaciones graves por el humo, gracias a la evacuación inmediata y al protocolo de emergencia implementado por los responsables del local. Sin embargo, el incidente sirve como recordatorio de la necesidad de realizar mantenimientos periódicos en los equipos electrónicos y de cocina.