El mundo de la aviación se encuentra consternado tras el trágico accidente aéreo ocurrido en Corea del Sur este domingo. Los reportes iniciales señalan que más de un centenar de personas han perdido la vida, en su mayoría ciudadanos coreanos. Mientras que un pequeño grupo de pasajeros y tripulantes lucha por sobrevivir.
El siniestro, acaecido en el aeropuerto internacional de Muan, ha sacudido a la opinión pública. Debido a las impactantes imágenes que circulan en redes y a las declaraciones de las autoridades de rescate que confirman la magnitud de la tragedia. La aeronave, identificada como el vuelo 7C2216 de la compañía Jeju Air, partió de Bangkok (Tailandia) a primera hora de la mañana y tenía previsto un aterrizaje seguro en Muan.
Sin embargo, el aterrizaje se complicó a las 9:07 (00:07 GMT), cuando el avión afectado se salió de la pista y se estrelló contra el vallado del aeropuerto. Las escenas posteriores, compartidas en redes, muestran los restos del fuselaje y la intensa labor de los bomberos por controlar las llamas.
Trágico balance de víctimas
El siniestro ha dejado un saldo devastador que supera los 100 muertos, aunque las cifras todavía varían. Según el servicio de bomberos local, hasta el momento se han confirmado 122 víctimas mortales, pero las autoridades estiman que la cifra real podría ascender a 179 fallecidos. El avión transportaba un total de 181 personas, incluidas seis miembros de la tripulación, 173 pasajeros coreanos y dos pasajeros tailandeses.
Pese a la magnitud del impacto, se informó del rescate de dos sobrevivientes: un tripulante y un pasajero. Por el momento, se desconoce el estado clínico de estos diferentes sobrevivientes, pero las autoridades esperan que aporten datos clave para esclarecer qué sucedió en los últimos minutos de vuelo. La mayoría de los cuerpos fueron encontrados en los alrededores de la zona de impacto, mientras que algunos pasajeros continúan desaparecidos.
Posibles causas del accidente
La Policía y el cuerpo de bomberos han iniciado una investigación para determinar las causas exactas de este accidente aéreo. Las primeras hipótesis apuntan a un fallo en el tren de aterrizaje de la aeronave, supuestamente provocado por la colisión con un ave poco antes de tocar pista. Este tipo de incidente, aunque poco frecuente, puede generar graves daños en componentes críticos del avión, incluyendo motores y mecanismos de aterrizaje.
La investigación se ha centrado en analizar las grabaciones de la caja negra y los testimonios preliminares de los dos sobrevivientes. El objetivo es confirmar o descartar el choque con un ave como desencadenante principal de la tragedia. Expertos en aeronáutica, tanto locales como internacionales, han sido convocados para brindar asesoría técnica y garantizar un proceso de indagación riguroso.
Coordinación de rescate y duelo nacional
El concurrido aeropuerto internacional de Muan se transformó de inmediato en un centro de operaciones de emergencia, congregando a los bomberos, personal médico y miembros de la Policía. La prioridad era sofocar el incendio y localizar a posibles sobrevivientes entre los escombros. Horas más tarde, las autoridades de salud emitieron un llamado urgente a donar sangre y voluntarios acudieron para apoyar en tareas logísticas.
En medio de la conmoción, varios medios locales destacan la solidaridad de la comunidad surcoreana con las víctimas y sus familias. Se han habilitado espacios de atención psicológica para quienes vivieron de cerca el accidente o perdieron a sus seres queridos. También se colocaron ofrendas florales cerca de la zona cero, donde se han registrado escenas de dolor y oraciones en memoria de los fallecidos.
Investigación en curso y repercusión internacional
La magnitud de esta tragedia ha generado reacciones en todo el mundo. Diversos organismos internacionales se han sumado a las muestras de pesar y han ofrecido asistencia técnica para esclarecer los motivos del siniestro. Por ahora, el Ministerio de Transporte de Corea del Sur se esfuerza por asegurar la transparencia de la investigación y ha garantizado que publicará todas sus conclusiones de forma oportuna.
Mientras tanto, la aparición de impactantes imágenes en redes sociales y en medios internacionales mantiene la atención global puesta en este accidente de avión en Corea del Sur. Se espera que los hallazgos finales sirvan de aprendizaje para futuras operaciones y que permitan establecer protocolos de seguridad más estrictos, sobre todo en los aeropuertos con alto flujo de aves.