Durante el día de ayer los Mossos de Esquadra nos informaron que estaban investigando una insólita muerte de un hombre que había sido abandonado en el hospital de Blanes, en la comarca de la Selva. Los hechos tuvieron lugar en la tarde del sábado, y las autoridades tuvieron constancia del suceso a las siete de más informaciones sobre el incidente. Se supo que un grupo de personas a bordo de un vehículo habían dejado a la víctima en un estado muy grave a las puertas del centro médico.
La posible causa de la muerte
Según confirmaron los Mossos d'Esquadra, poco después de las siete de la tarde recibieron el aviso de la muerte del hombre, al que habían abandonado malherido en el hospital de Blanes. Según fuentes cercanas al caso, varios hombres que iban en un vehículo de color negro han dejado a la víctima en la zona de urgencias del hospital de Blanes.
La víctima sufrió una herida en la cabeza, en la zona de la nuca. Aunque una de las hipótesis iniciales era que podía tratarse de una lesión provocada por un arma de fuego, tal y como informamos ayer en XCatalunya, el primer análisis forense apunta a una herida por un objeto punzante.
La División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos en Girona se ha hecho cargo del caso y hasta el lugar se ha trasladado la comitiva judicial, encabezada por el juzgado de instrucción 5 de Blanes, en funciones de guardia.
En estos momentos se desconoce la identidad de la víctima y el hombre iba indocumentado. Los investigadores siguen el rastro del coche que le ha abandonado ante el centro hospitalario y también trabajan para identificar a sus ocupantes.
El cuerpo de la víctima le han trasladado al Instituto de Medicina Legal en Girona, donde se prevé que los forenses le hagan la autopsia el lunes para determinar las causas de la muerte. Los investigadores están analizando las cámaras de videovigilancia del hospital y de zonas cercanas para seguir el recorrido del vehículo. El caso está bajo secreto de sumario.
Un preocupante aumento del uso de armas de fuego
En los últimos años, Catalunya ha experimentado un aumento en los crímenes relacionados con el uso de armas de fuego, especialmente en entornos urbanos. Aunque no es un problema tan extendido como en otros lugares de Europa, se ha observado un incremento en los delitos graves que involucran este tipo de armas, en particular en ciudades como Barcelona.
Estos incidentes suelen estar vinculados a ajustes de cuentas entre bandas criminales, tráfico de drogas o robos violentos. La presencia de armas de fuego en estas situaciones incrementa el peligro para la ciudadanía, ya que, en muchas ocasiones, los tiroteos se producen en espacios públicos, poniendo en riesgo a personas inocentes.
Las autoridades catalanas, junto con los Mossos d'Esquadra, han intensificado los esfuerzos para combatir el tráfico ilegal de armas y reducir la violencia armada. Sin embargo, los delitos con armas de fuego continúan siendo un reto, especialmente en áreas donde la criminalidad organizada tiene mayor presencia. La proliferación de armas ilegales y el uso de estas en conflictos entre grupos delictivos preocupan a los cuerpos de seguridad y han generado un debate sobre la necesidad de endurecer las leyes de control de armas en el país.