Playa con personas tomando el sol y un gran símbolo de advertencia en el centro de la imagen

Doble tragedia mortal en una playa catalana

Dos hermanos británicos fueron víctimas del fuerte oleaje y las rocas, su padre pudo ser rescatado

Una tarde que comenzó como tantas otras en la costa mediterránea terminó en tragedia. Dos niños británicos, hermanos, han perdido la vida  en circunstancias que aún se encuentran bajo investigación. Este suceso ha dejado a toda una comunidad en shock y demandando respuestas sobre las medidas de seguridad en playas.

La alerta a causa de dos menores

Según ha informado Protecció Civil, el suceso ocurrió el pasado martes por la tarde. Dos hermanos británicos, de 11 y 13 años, entraron al mar en una zona cercana a rocas en la platja Llarga de Salou, en la provincia de Tarragona. La alerta se recibió a las 20:47 horas a través del número de emergencias 112.

El padre de los menores también entró en el agua y fue rescatado con vida por los equipos desplegados. En el operativo participaron siete unidades del Sistema d’Emergències Mèdiques, un equipo de psicólogos, la Policía Local de Salou, los Mossos d’Esquadra y los Bombers, con cinco dotaciones en total.

Vista panorámica de una playa con arena dorada, mar azul y vegetación en primer plano, edificios al fondo y cielo despejado
Playa de la costa Daurada | Grupo Blaumar

Ya hay otros turistas fallecidos este verano

Según informa La Vanguardia, la situación del mar era complicada, con mala mar y corrientes que dificultaron el retorno a la orilla La Vanguardia. Los menores habrían entrado en una zona de rocas, lo que aumentó el riesgo y complicó las labores de rescate.

Este doble fallecimiento se suma a un panorama cada vez más grave en términos de seguridad en las playas catalanas. Desde el inicio de la temporada de verano, el pasado 15 de junio, ya son 16 las personas fallecidas en playas de Cataluña. Esa cifra supera por cinco  las que hubo el mismo periodo del año anterior. Este martes fue especialmente trágico, ya que también ha fallecido un turista alemán de 54 años en la playa del Cap de Sant Pere de Cambrils.

La campaña de verano

Desde el inicio oficial de la campaña estival, el 15 de junio, se ha constatado un incremento preocupante en los incidentes acuáticos fatales en la costa catalana. Las 16 muertes registradas hasta ahora representan un aumento significativo respecto al mismo intervalo del año anterior, cuando se contabilizaron 11 fallecimientos.

Vista panorámica de una playa con sombrillas de colores, palmeras, un paseo marítimo y una carretera junto al mar en un día soleado
Platja Llarga de Salou | The Palm Experience Hotel

Cambrils y Salou se han visto especialmente afectadas. El caso de Cambrils ocurrió esta misma jornada, en la playa del Cap de Sant Pere. Un turista alemán murió ahogado pese a que la playa tenía bandera amarilla de precaución.

Funcionamiento del dispositivo de emergencia

La respuesta institucional fue rápida. La llamada al servicio 112 alertó a los servicios sanitarios y de emergencias que desplegaron un operativo multidisciplinar que albergaba sanitarios, psicólogos y fuerzas del orden público. Hubo coordinación entre SEM, Mossos, Bombers y Policía Local, siguiendo protocolos establecidos para incidentes en playas.

No obstante, ni la rápida intervención ni la movilización de recursos pudo impedir el desenlace fatal para los dos menores. El padre pudo ser rescatado, pero la fuerza del mar impidió la recuperación de los niños.

Playa con sombrillas y tumbonas azules, personas disfrutando del mar y edificios al fondo junto a un acantilado
Platja Llarga de Salou | Grupo Blaumar

Seguridad en entornos turísticos costeros

Hace años ya se produjeron incidentes similares en Salou. Por ejemplo, en 2009 dos jóvenes británicos murieron tras nadar de noche fuera de zona vigilada en condiciones meteorológicas adversas. Queda demostrada la recurrencia con la que las advertencias oficiales son ignoradas, favoreciendo así finales trágicos ante los riesgos del mar y la corriente en destinos turísticos costeros.

La pérdida de estos dos niños británicos en la platja Llarga de Salou vuelve a poner sobre la mesa el debate sobre reforzar, o no, la seguridad en entornos turísticos de la costa. Este verano, que ya suma más fallecidos que la temporada anterior, ha visto incidentes en zonas vigiladas y no vigiladas.