Este es el edificio en riesgo de derrumbe

Desalojo exprés de un edificio por riesgo de derrumbe

Los vecinos explican que la situación era insostenible

La alarma se encendió en la calle del Nord de Lleida este miércoles, cuando quince personas fueron desalojadas de urgencia de su edificio debido al peligro inminente de colapso estructural. La evacuación se produjo tras una inspección municipal derivada de una llamada de los vecinos a la Guardia Urbana. La situación obligó a cerrar al tráfico el tramo comprendido entre la Rambla Ferran y la calle Comerç. El diario Segre ha publicado una extendida información sobre la situación, así como declaraciones de los vecinos afectados.

El origen del problema: grietas agravadas por una obra colindante

El bloque afectado, ubicado en el número 3 de la calle del Nord, constaba de siete pisos, de los cuales cinco estaban habitados por doce adultos y tres menores. Desde hace más de un mes, los residentes habían alertado sobre la aparición de grietas en las viviendas y en el bar de la planta baja, las cuales se fueron agravando con el paso de los días. Según los vecinos, la situación se deterioró aún más desde el inicio de unas obras en un solar contiguo en la Rambla Ferran.

Un coche de policía de los Mossos d'Esquadra con gotas de lluvia en la carrocería.
Coches de los Mossos d'Esquadra | ACN

El pasado viernes, un fuerte estruendo alertó a los residentes, quienes vieron cómo las grietas aumentaban de tamaño. “Hoy (por ayer) he salido a pasear a mi perrita y al volver no podía cerrar la puerta. En casa tengo ahora grietas de dos dedos de ancho”, relató una afectada. La denuncia pública de la situación aceleró la intervención de las autoridades, que, tras una nueva inspección, concluyeron que el inmueble presentaba un riesgo inminente de desplome.

Un desalojo inmediato y realojo en hoteles

Los vecinos fueron evacuados con lo puesto y solo se les permitió recoger algunas pertenencias esenciales antes de que las autoridades ordenaran tapiar la puerta del edificio para evitar la entrada de okupas. “Nos han dicho que había peligro y que teníamos que salir ya del edificio. Ha sido horroroso, pero al menos lo podemos contar”, explicó una de las residentes al diario Segre.

El seguro de la comunidad de vecinos asumió la reubicación provisional de los afectados en establecimientos hoteleros, garantizando cobertura hasta por un año. Sin embargo, muchos desconocen si podrán regresar a sus hogares o si el edificio será definitivamente demolido. “Nos han dicho que primero deben reforzar la obra de al lado y después arreglar nuestros pisos”, indicó otra afectada.

Declaración de ruina inminente y futuro del inmueble

Tras la inspección técnica,  la Paeria declaró la ruina inminente del edificio y otorgó un plazo de varios días a la propiedad para proceder a su derribo. En caso de que no se ejecute, será el propio ayuntamiento quien asuma la demolición de forma subsidiaria.

Este suceso ha puesto en evidencia la importancia de atender a tiempo las denuncias vecinales sobre problemas estructurales. Vecinos y expertos han señalado la necesidad de reforzar los controles en las obras cercanas a edificios antiguos para evitar situaciones de riesgo como la vivida en Lleida. Mientras tanto, los residentes del número 3 de la calle del Nord afrontan un futuro incierto, a la espera de una solución definitiva para sus hogares.