El temporal de nieve que desde hace horas afecta al Pirineo ha generado complicaciones importantes en la circulación, con afectaciones directas en varias vías importantes. Las autoridades de tránsito han tenido que tomar medidas drásticas para garantizar la seguridad de los conductores, en una jornada marcada por el frío intenso y condiciones meteorológicas adversas.
Tres carreteras completamente cerradas
Este domingo, según datos confirmados por el Servei Català de Trànsit (SCT), hasta tres carreteras han tenido que ser cortadas de forma total debido a las acumulaciones de nieve y al riesgo que suponen para los vehículos. Desde primeras horas de la mañana, efectivos de mantenimiento de carreteras están trabajando intensamente para reabrir cuanto antes estas vías.
Las carreteras cortadas son la BV-4024, a la altura del Coll de Pal; la BV-4243 en Rasos de Peguera, y la GIV-4016, que une la localidad de Toses con la Collada de Toses. Son vías especialmente concurridas los fines de semana, por lo que los cortes han afectado a numerosos conductores que planeaban actividades en la nieve o desplazamientos turísticos.

Cinco vías requieren cadenas para circular
Además del cierre total de estas vías, las autoridades han confirmado que en otras cinco carreteras se ha impuesto la obligatoriedad del uso de cadenas o equipamientos especiales para garantizar la seguridad ante la presencia de hielo y nieve. La carretera N-260, concretamente en el Port del Cantó, ha visto restringido totalmente el paso de camiones debido al peligro existente en la zona.
La misma carretera N-260, en el tramo de la Collada de Toses, también obliga a los conductores a usar cadenas para evitar accidentes o salidas de la vía. Además, la GIV-5264, que conecta Vilallonga de Ter con Setcases, se encuentra en condiciones especialmente complicadas, dificultando especialmente el acceso a destinos turísticos populares en la temporada invernal.
Por otra parte, la carretera C-38, entre Molló y el Coll d'Ares, exige también el uso de equipamientos especiales debido a la intensidad del temporal. Esta vía, utilizada habitualmente por conductores que se dirigen hacia Francia, presenta condiciones de circulación especialmente difíciles, según alertan desde Trànsit.
Finalmente, también se requiere utilizar cadenas en la BV-4031, situada en el Coll de la Creueta, una zona con elevaciones pronunciadas que incrementa el riesgo de accidentes si no se adoptan medidas preventivas adecuadas.
Más incidentes en otras vías catalanas
Las consecuencias del temporal no se han limitado al Pirineo. En Argentona, concretamente en la carretera BV-5106 (comarca del Maresme), se han registrado desprendimientos que han obligado a los servicios de emergencia a regular el tráfico dando paso alternativo para garantizar la seguridad. En este punto, los conductores están enfrentando retrasos significativos durante toda la mañana.
Además, la lluvia intensa está dificultando también la circulación en la autopista AP-7 entre Olèrdola y Vilafranca del Penedès. Un accidente en dirección sur ha dejado varios vehículos detenidos en el arcén, mientras que en sentido norte, los conductores se han visto afectados por retenciones que alcanzan los dos kilómetros.

Precaución máxima y recomendaciones oficiales
Ante esta situación, Protección Civil y el Servei Català de Trànsit insisten en la importancia de consultar la situación meteorológica y el estado de las carreteras antes de salir. Se recomienda reducir la velocidad y evitar desplazamientos innecesarios, especialmente en zonas afectadas por nieve y hielo.
Además, las autoridades recuerdan la importancia de llevar en el vehículo equipamientos adecuados como cadenas, mantas, agua y alimentos básicos ante posibles situaciones de emergencia que pudieran prolongarse durante horas debido al mal tiempo.