Las incidencias en las principales vías urbanas suelen generar un efecto dominó que rápidamente afecta la movilidad de miles de ciudadanos. Es especialmente notorio cuando el tráfico se concentra en arterias de alta circulación en horas punta, convirtiendo un incidente aparentemente menor en un caos de gran magnitud.
Justamente, eso es lo que ha ocurrido esta tarde en una conocida vía de acceso en Barcelona, provocando grandes retenciones y afectando el tránsito de forma considerable.
Un accidente complica el tráfico en plena tarde
Este jueves 27 de marzo de 2025, alrededor de las cuatro de la tarde, se ha producido un accidente en la Ronda de Dalt (B-20), una de las vías rápidas clave para la movilidad de la ciudad de Barcelona. El incidente ha tenido lugar en sentido Trinitat a la altura del barrio de Roquetes, lo que ha causado la interrupción parcial del tráfico, dejando inutilizado uno de los carriles disponibles en la vía.
Según ha informado oficialmente el Servei Català de Trànsit, el suceso ha originado colas kilométricas de vehículos que han llegado a extenderse desde Roquetes hasta más allá de Sant Gervasi. Numerosos usuarios afectados han informado a través de redes sociales que el tráfico está avanzando con extrema lentitud y la frustración aumenta conforme avanza la tarde.
Consecuencias directas sobre los conductores
La interrupción del carril, aunque solo sea parcial, ha significado un auténtico cuello de botella en uno de los tramos más transitados de la Ronda de Dalt. Además, cabe destacar que este tramo es utilizado diariamente por miles de conductores, especialmente en franjas horarias de salida laboral, como ha sucedido hoy.
Según reportes del Servei Català de Trànsit, los servicios de emergencia y las grúas ya están trabajando intensamente en la zona para restablecer la normalidad en la circulación lo antes posible. Sin embargo, la acumulación de vehículos atrapados en las retenciones dificulta las tareas, por lo que se estima que la normalidad tardará aún en restablecerse totalmente.
Las vías alternativas, también congestionadas
Como es habitual en este tipo de circunstancias, los conductores han comenzado rápidamente a buscar rutas alternativas, generando igualmente congestión en calles y avenidas adyacentes. El efecto del accidente, por tanto, no solo se limita a la Ronda de Dalt, sino que afecta también a la movilidad general de varios barrios cercanos, como Sant Gervasi, Sarrià y Les Corts, incrementando considerablemente el tiempo habitual de trayecto.
Las autoridades recomiendan, en la medida de lo posible, retrasar los desplazamientos por esta zona o utilizar el transporte público para aliviar el flujo vehicular. Esta recomendación cobra especial importancia en contextos como el actual, en los que un pequeño incidente provoca grandes repercusiones en la movilidad urbana.