La mañana del miércoles se ha convertido en un auténtico calvario para centenares de conductores que circulaban hacia Barcelona. Unas retenciones kilométricas, que han generado importantes molestias y retrasos en los desplazamientos cotidianos, han afectado seriamente a esta arteria principal en plena hora punta.
Colapso en plena hora punta
Según ha informado el Servei Català de Trànsit (SCT) mediante sus redes sociales oficiales, las retenciones han llegado a alcanzar hasta diez kilómetros. El tramo afectado se localiza entre Gavà y El Prat de Llobregat, en dirección a la capital catalana, una de las rutas más transitadas por quienes acceden desde el sur de la comarca del Baix Llobregat.
El aviso oficial del SCT se ha producido sobre las 8:26 horas, coincidiendo con el momento de mayor tráfico diario, cuando cientos de ciudadanos se desplazan hacia sus centros de trabajo y estudio.
La situación se ha prolongado durante buena parte de la mañana, generando un colapso significativo que ha requerido la activación de medidas extraordinarias para intentar agilizar la circulación.
Motivos detrás del atasco
Aunque inicialmente no se especificaron las causas exactas del colapso vial, fuentes cercanas a Trànsit han apuntado a la combinación de diferentes factores como posibles desencadenantes. Entre estos destacan las condiciones meteorológicas, que han complicado la circulación en diversos puntos de acceso a la ciudad, y posibles incidencias puntuales que han ralentizado aún más el tránsito vehicular.
Las cámaras de vigilancia del SCT, instaladas estratégicamente en la zona, han captado imágenes donde se observan claramente las largas filas de vehículos detenidos o avanzando lentamente, evidenciando la gravedad del problema. La circulación se ha visto afectada especialmente en los accesos a importantes núcleos empresariales y zonas industriales, multiplicando así las molestias para muchos trabajadores.
Consecuencias y reacción de los afectados
El atasco ha provocado que numerosos usuarios hayan llegado tarde a sus destinos, afectando directamente a la actividad cotidiana en empresas, comercios y centros educativos.
En redes sociales, los afectados no han dudado en mostrar su malestar, criticando especialmente la falta de alternativas efectivas para evitar este tipo de situaciones.
Varias voces han reclamado soluciones permanentes para esta vía, habitual foco de problemas circulatorios, especialmente en horas punta. Usuarios frecuentes de la C-31 solicitan medidas concretas como mejoras en la señalización, ampliación de carriles o incentivos al uso de transporte público que puedan reducir considerablemente estos episodios.