La jornada de este jueves está marcada por una situación que pone a prueba la paciencia de los conductores que circulan por una de las principales arterias viarias del país. A pesar de que muchos confiaban en una mañana tranquila, el tráfico se ha convertido en un auténtico reto para quienes tenían previsto utilizar esta vía para sus desplazamientos. Las primeras informaciones ya apuntaban a complicaciones, pero la evolución de los acontecimientos ha hecho que el escenario se vuelva cada vez más complejo y tenso para miles de personas.
Accidentes y camiones implicados: la chispa que enciende el caos
La AP-7 vive uno de sus peores días de la semana en cuanto a retenciones y problemas de circulación, especialmente en el entorno de Cambrils, en dirección Martorell/Barcelona. Según las actualizaciones más recientes del Servei Català de Trànsit, un accidente ha obligado a cortar un carril de la autopista en sentido norte, provocando un kilómetro de lentitud y paradas prácticamente continuas. El incidente se ha visto agravado por la implicación de dos camiones, lo que ha dificultado las labores de retirada y ha multiplicado las retenciones.
De hecho, el SCT acaba de informar de que la vía ha quedado cortada en el quilómetro 261 mientras se llevan a cabo las tareas de retirada de los vehículos siniestrados. La previsión es que este tramo permanezca cortado hasta aproximadamente las 12 del mediodía. Mientras, se están haciendo desvíos hacia la A-7 por la salida 37.
A la situación generada en el entorno de Cambrils hay que sumar otros problemas de circulación igualmente preocupantes. Las últimas informaciones advierten de intensidades elevadas y paradas en sentido sur, especialmente entre Sant Sadurní d’Anoia y Subirats. En este caso, la causa ha sido un camión averiado en el arcén, lo que ha reducido la capacidad de la vía y ha ralentizado el tráfico de forma notable.
Este tipo de incidencias no solo generan atascos locales, sino que también contribuyen a crear un efecto embudo que se extiende a otros tramos. Así, los conductores que circulan en dirección a Barcelona y los que se desplazan hacia el sur se ven atrapados en largas filas, con la incertidumbre de no saber cuándo podrán retomar la marcha con normalidad. El Servei Català de Trànsit recomienda máxima prudencia y estar atentos a nuevas actualizaciones, ya que la situación puede variar en cuestión de minutos.
Retenciones persistentes: múltiples focos de congestión
El panorama se complica todavía más si tenemos en cuenta los datos sobre retenciones y lentitud en otros puntos de la AP-7. En sentido sur, las paradas se suceden entre la Roca y Montornès del Vallès, así como entre Santa Perpètua de Mogoda y Barberà. Por si fuera poco, en sentido norte también se registran retenciones importantes entre Sant Cugat y Barberà del Vallès. Esta dispersión de incidencias convierte la AP-7 en un auténtico calvario para quienes se ven obligados a desplazarse por esta vía hoy.
A lo largo de los últimos años, la AP-7 ha sido protagonista habitual de atascos kilométricos, especialmente en días de alta movilidad o tras accidentes con vehículos pesados implicados. Sin embargo, la simultaneidad de varios incidentes en diferentes tramos a lo largo de una misma jornada es una situación menos frecuente y que pone en jaque la capacidad de respuesta de los servicios de tráfico.