Un nuevo incidente vial pone sobre la mesa el grave problema del alcohol al volante, especialmente cuando quien conduce es responsable de vehículos pesados. Esta vez, el protagonista de la noticia es un camionero que generó alarma entre los conductores por su comportamiento imprudente y altamente peligroso en una transitada autovía catalana.
Un conductor temerario en plena autovía
Los hechos tuvieron lugar el pasado lunes por la tarde alrededor de las 16:30, en la A-2, una vía muy frecuentada especialmente en días laborales por vehículos particulares y transporte de mercancías. Varias llamadas alertaron rápidamente a los Mossos d'Esquadra sobre un camión que circulaba de manera errática, poniendo en riesgo a los demás usuarios al invadir constantemente el arcén y no respetar las distancias de seguridad mínimas establecidas.
Inmediatamente, efectivos del Área Regional de Tráfico se desplazaron hasta la zona señalada, concretamente en la comarca del Urgell, para localizar al conductor sospechoso. El temor de un accidente grave hizo que las patrullas aceleraran su intervención, ya que el vehículo pesado podía causar fácilmente un choque múltiple o provocar una salida de vía peligrosa para otros conductores.
Persecución de película y detención
Tras un operativo rápido y coordinado, los agentes consiguieron dar con el camión, que en ese momento se encontraba estacionado en el aparcamiento de un restaurante de carretera en la vía paralela N-2, a la altura del municipio de Bellpuig. Al entrar en el establecimiento, los policías comprobaron cómo un hombre que coincidía perfectamente con la descripción facilitada intentaba escapar por la puerta trasera del local.
La fuga precipitó una breve persecución a pie que terminó con el sospechoso interceptado y detenido rápidamente por los Mossos. En el momento de su captura, el hombre, un camionero de 50 años, presentaba claros síntomas de embriaguez, como dificultad para mantenerse en pie, incoherencia al hablar y fuerte olor a alcohol.
Negativa a realizar el control de alcoholemia
Cuando los agentes solicitaron al conductor que realizara la prueba de alcoholemia para confirmar oficialmente su estado, este se negó de forma rotunda. Dada esta negativa y su evidente condición de embriaguez, los agentes procedieron a su inmediata detención. Los delitos que se le imputan incluyen conducción temeraria, negativa a someterse al control de alcoholemia y circular bajo los efectos del alcohol.
Este tipo de delitos se han vuelto recurrentes en las carreteras catalanas y preocupan especialmente cuando implican vehículos de grandes dimensiones.
Según estadísticas recientes de tráfico, aproximadamente un 30% de los accidentes mortales en vías rápidas están relacionados con la ingesta de bebidas alcohólicas o sustancias estupefacientes por parte de los conductores.
Consecuencias judiciales inmediatas
Tras pasar la noche en dependencias policiales, el detenido fue presentado este martes ante el juez del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Cervera, quien deberá decidir ahora sobre las sanciones penales aplicables en este caso. Estas podrían incluir desde la retirada inmediata del permiso de conducir hasta penas privativas de libertad, especialmente considerando el alto riesgo generado por sus acciones.