Alerta por altas temperaturas en Catalunya

El calor vuelve a azotar a trabajadores de Barcelona: Dos personas atendidas

Trabajadores sin climatización en vehículos de limpieza sufren riesgos extremos en la ola de calor de Barcelona

Las calles de Barcelona se han convertido estos días en un auténtico termómetro humano, testigos del impacto de una ola de calor que, lejos de amainar, continúa golpeando con fuerza. Bajo un sol implacable, quienes trabajan a pie de calle, desde barrenderos hasta operarios de barredoras, se enfrentan a jornadas extenuantes. El calor deja de ser un dato más y se convierte en protagonista involuntario de historias trágicas y advertencias urgentes.

Golpes de calor y trabajadora fallecida

Este martes, según denuncian desde el sindicato CGT, al menos dos trabajadores del servicio de limpieza en Barcelona han requerido atención médica por golpes de calor. Una barrendera que se desplomó mientras trabajaba a pie en Poblenou, y un conductor de barredora cuyo vehículo carecía de aire acondicionado.

Coincide esta emergencia con la muerte, el pasado sábado, de Montserrat Aguilar, una trabajadora de limpieza de 51 años contratada por FCC, que se desplomó al regresar a casa tras su turno en Ciutat Vella, en pleno pico térmico. Aunque la autopsia aún no determina la causa exacta, los indicios apuntan a un posible golpe de calor. El Ayuntamiento ha abierto ahora un expediente informativo a FCC tras conocerse el mensaje vía WhatsApp en el que Montserrat confesaba haber “tenido una tarde muy mala” y sentirse al borde de morir.

Persona protegiéndose del sol con una toalla en el cuello y un icono de termómetro y fuego indicando altas temperaturas.
Suben los termómetros | XCatalunya, Sarwono de FeatherpenCS, PraewBlackWhite

Este episodio mortal se produce en un contexto climatológico excepcional. El Observatorio de Can Fabra ha registrado un junio sin precedentes, con una temperatura media de 26 °C, la máxima jamás registrada desde 1914, y valores diarios que alcanzaron los 37,9 °C. Se trata de una ola de calor temprana, intensa y persistente, que obliga a repensar medidas de prevención laboral y de salud pública.

Protocolos frente al calor

Ante estas alertas, FCC defiende que dispuso de las medidas preventivas habituales: ropa transpirable, gorras, crema solar, formación y protocolos frente a golpes de calor. El Ayuntamiento, por su parte, a mediados de abril requirió a las empresas concesionarias que actualizaran sus protocolos, considerando la experiencia de olas de calor anteriores.

Sin embargo, la realidad diaria desde los operarios cuestiona su efectividad. Victoria Chacón, portavoz de CGT, denuncia que algunos vehículos carecen de aire acondicionado, alcanzando hasta 41 °C en cabinas cerradas. Añade que, pese a las reiteradas solicitudes, la información se reduce a un tríptico genérico sin manuales concretos para situaciones extremas.

Una calle urbana con un carril bici rojo y un edificio histórico al fondo, con un termómetro en primer plano mostrando una temperatura cálida.
Calor en las calles de Barcelona | PixaBay, RossHelen, geralt, XCatalunya

Comparativa con veranos anteriores

El junio de 2025 supera ampliamente los registros de la ola de calor de 2003: ni siquiera en esa histórica canícula, el promedio mensual fue tan alto. La intensidad y precocidad de esta ola obligan a actualizar protocolos y conciencia colectiva. La experiencia reciente apunta a que los ajustes puntuales —adelantar horarios, hidratarse, formar— son necesarios, pero insuficientes si no se consolidan en normativas laborales que refuercen las condiciones en los trabajos al aire libre.

Pronóstico para los próximos días

En Barcelona no se augura tregua en corto. Las temperaturas diurnas seguirán superando los 35 °C, y las mínimas se mantendrán altas, reduciendo la recuperación térmica nocturna.

Esto deja en evidencia que las jornadas al sol, sin climatización adecuada ni protocolos aplicables, pueden transformarse en situaciones de riesgo extremo. La muerte de Montserrat y los golpes de calor ocurridos esta semana son una llamada urgente a la precaución individual e institucional.