La N-340, a la altura de Alcanar, fue escenario este domingo de un aparatoso accidente de tráfico que ha movilizado diversos servicios de emergencia. El siniestro, registrado alrededor de las 17:31 h, consistió en el vuelco de un vehículo, cuyo conductor quedó atrapado en el habitáculo.
Según la información ofrecida por los Bombers de la Generalitat, se destinaron hasta cuatro dotaciones de bomberos para liberar y atender al afectado. El Servei d’Emergències Mèdiques, por su parte, activó dos unidades terrestres y trasladó finalmente al conductor al Hospital Verge de la Cinta en Tortosa, en estado menos grave.
Un aparatoso incidente que genera largas colas
La incidencia, confirmada también por el Servei Català de Trànsit, generó medio kilómetro de retenciones en ambas direcciones. Desde primera hora, se estableció un paso alternativo en la N-340 para asegurar que la circulación de vehículos pudiera mantenerse, aun con las lógicas restricciones. Pese a que la densidad del tráfico no alcanzó volúmenes críticos en esta época del año.
La reducción de carriles y la presencia de los equipos de emergencia en la calzada provocó la ralentización del paso de automóviles y camiones. Tanto Trànsit como Mossos participaron en la regulación y control de la situación, informando a los conductores a través de redes y paneles de señalización.
El vuelco, tal como relatan fuentes de los Bombers de la Generalitat, se habría producido cuando el vehículo se salió de la vía por causas que todavía se estan investigando. Los agentes trabajaron de forma coordinada para asegurar el perímetro, evitar posibles fugas de combustible y rescatar al conductor atrapado.
Para ello, emplearon material especializado en rescate vehicular, con el fin de extraer al herido minimizando el riesgo de lesiones adicionales. Una vez liberado, fue el SEM quien valoró su estado y dictaminó la necesidad de trasladarlo en ambulancia al centro hospitalario. Se confirmó poco después que el afectado se hallaba en estado menos grave, aunque aún deberá someterse a exámenes médicos para descartar complicaciones.
Una gran labor por parte de los servicios de emergencia
El operativo conjunto incluyó, además, la realización de maniobras de limpieza y acondicionamiento de la vía, ya que el vuelco dejó restos de cristal y otros materiales en el asfalto. La prioridad de los equipos de emergencia fue, en primer lugar, garantizar la seguridad del accidentado. Seguida de la recuperación de las condiciones de circulación para el resto de usuarios de la carretera.
Para ello, se dio prioridad a la apertura de un paso alternativo, al tiempo que los bombers concluyeron las tareas de acondicionamiento del vehículo siniestrado. La rápida intervención de bomberos, sanitarios y fuerzas de seguridad ha evitado que el suceso tuviera consecuencias más graves. No obstante, el vuelco del vehículo y la retención temporal han vuelto a poner de manifiesto la necesidad de extremar la prudencia.
En vías tan transitadas como la N-340, donde los desplazamientos pueden verse comprometidos con relativa facilidad ante cualquier incidente. Afortunadamente, todo parece indicar que el conductor evoluciona favorablemente y se espera su pronta recuperación.