La serie de televisión Polseres vermelles se convirtió en un verdadero fenómeno sociológico. Es una de las producciones de TV3 con mayor éxito de audiencia; su cruce de diversión y emoción, consiguió seducir a los telespectadores, hasta el punto que algunas de sus escenas se siguen recordando muy bien.
A pesar de que se emitió entre 2011 y 2013, más de 10 años después de su fin, algunos de sus episodios permanecen en los corazones de muchas personas que no pudieron evitar conmoverse ante sus situaciones más emotivas. Ese es el caso del episodio en el que Jordi -interpretado por Igor Szpakowski- se despedía de su pierna precisamente el día de su santo, una fecha tan señalada en Catalunya como Sant Jordi. "Yo siempre he pensado que sería chulo estar en Barcelona por mi santo...", exclamaba el joven Jordi. La cura y sensibilidad, pero a la vez su esfuerzo para no caer en un tono hacia lo lacrimógeno, que eran señas de identidad de la serie, quedó manifestado a través de esta inolvidable escena.
Polseres vermelles seguía el día a día de seis chicos de entre 8 y 17 años que coinciden en un hospital debido a distintas enfermedades. Son jóvenes que pasan por momentos difíciles, que tienen cáncer, anorexia, trastorno de Asperger, han tenido un accidente..., pero sobre todo tienen muchas ganas de vivir y experimentar, enamorarse, reír, jugar... Sin rehuir las circunstancias especiales en las que se encuentran, su historia muestra las vivencias y situaciones propias de los chicos y chicas de su edad, pero con la diferencia de que su mundo es un hospital, lo que hace que lo vivan todo con una gran intensidad. Lejos de la tristeza, la serie tiene como nexo de la historia las ganas de vivir, la superación y la alegría.
A partir de una idea original de Albert Espinosa -quien con tan solo 14 años, los médicos le detectaron un osteosarcoma, un agresivo cáncer en los huesos, Polseres vermelles está dirigida por Pau Freixas -a su vez director también del largometraje generacional Herois (2010)-. Entre los integrantes del joven reparto protagonista, destacaron Àlex Monner, Joana Vilapuig, el citado Igor Szpakowski, Marc Balaguer, Nil Cardoner i Mikel Iglesias. Junto a ellos, cabe mencionar a ilustres veteranos como Marta Angelat, Albert Pérez y Andreu Rifé, entre otros.
Además de su incontestable gran éxito de audiencia y el enorme impacto que generó, Polseres vermelles también fue reconocida a través de diversos premios; entre ellos, el Fotogramas de Plata al Mejor Actor de Televisión para Àlex Monner, el Premio Ondas a la Mejor Serie de Televisión Nacional y el Premio Zapping a la Mejor Teleserie.