Acabó mayo, hemos empezado junio y se acerca una de las fechas más señaladas de nuestro calendario, la Verbena de San Juan. Para muchos es la mejor noche del año por múltiples motivos. Es como la puerta de entrada al verano, hace buen tiempo, hay ganas de fiesta, de golgorio y de vacaciones y, por último, es una de las noches más cortas del año.
En los Països Catalans es una noche de fiesta. Se come la tradicional Coca de San Juan, se brinda con cava y se disfruta de un buen espectáculo pirotécnico. El grupo Esclat Bonpreu es consciente de ello, lo sabe y por este motivo ha creado una promoción que incluye Coca de San Juan y cava a un precio inmejorable.
El lote tiene un coste de 19.90 euros. Incluye 2 cocas de Perafita que están valoradas en 19.90 euros y una botella de cava gran cuvee Brut Elyssa de la bodega Freixenet, de 75 centílitros, valorada en 9,99 euros. De modo que la botella es un regalo, porque el precio del lote tiene el mismo precio que las dos cocas.
Coca de San Juan, ¿cómo hacerla?
La Coca de San Juan es uno de los postres más conocidos de la gastronomía catalana. Tiene parecidos con otros tipos de coca o de postres de otras épocas del año, pero no tiene nada que ver. La coca tiene muchas diferencias respecto de otros dulces tradicionales como el Roscón de Reyes o los buñuelos de Cuaresma.
Hacerla es más fácil de lo que parece. Comenzamos con la crema pastelera para que esté bien fría. La hacemos y la reservamos para el momento final de cubrir la coca. En un cazo calentamos la leche, reservando un poco en un cuenco, junto el azúcar, la vaina de vainilla abierta y la cáscara de limón. Removemos y dejamos a fuego medio bajo, para que la leche se aromatice lentamente, hasta que casi hierva .
Luego es el momento de añadir la Maizena a la leche que tenemos reservada. Ahora toca batir las yemas y agregarlas también a la mezcla. Tenemos que estar muy atentos y no despistarnos, pues cuando la leche empiece a hervir hay que retirar el cazo inmediatamente del fuego. Luego sacaremos la vaina de vainilla y la cáscara de limón y abocaremos la mezcla del cuenco suavemente mientras removemos con unas varillas.
No hemos terminado
Pondremos de nuevo el cazo al fuego. Luego tenemos que remover la mezcla hasta que la veamos espesa, aproximadamente unos cinco minutos. Dejaremos la crema en el frigorífico, tapada con un film.
Toca hacer el fermento: mezclaremos en un cuenco los 100 g de harina de fuerza, con la levadura y la leche ligeramente tibia o a temperatura ambiente. A continuaciín, dejamos fermentar durante una hora o más.
Una vez el fermento esté listo, hacemos la masa final de la coca. Para conseguirlo, mezclaremos la harina con los huevos batidos, unidos a la sal, y la yema, la leche, la ralladura de naranja, el azúcar y la miel. Seguiremos mezclando y luego echaremos el fermento, para seguir amasando hasta tener una masa más o menos ligada.
Más cosas. En ese momento tocará agregar la mantequilla en trocitos y luego seguiremos amasando hasta tener una masa lisa y ligeramente pegajosa. La coca final será plana sin volumen, pero ahora toca formar una bola y dejar que fermente, o sea, que duplique su volumen.
Ya estamos terminando
Como en los programas de cocina, pondremos harina en la mesa de la cocina. Encima, colocaremos la masa, le sacaremos el aire de la fermentación con las yemas de los dedos y estiraremos la masa hasta dejarla de un centímetro de grosor.
Ya llega el horno. Colocaremos la masa estirada sobre una bandeja de horno forrada con papel, pincelamos con huevo para darle color y dejamos fermentar de nuevo hasta que casi duplique su volumen.
Calentamos el horno a 200º calor arriba abajo y ponemos el tiempo. No es exacto, pero será menos de una hora. Tendrás que ir controlándolo. Más huevo batido y luego piñones y crema pastelera para decorar.