Capturas de un vídeo viral

El perrito desesperado por un 'ataque' de mariposas

El animal no sabe cómo deshacerse de los artrópodos

En el mundo de las redes sociales, los perros continúan siendo los protagonistas de los vídeos más tiernos, divertidos e inesperados. Sus reacciones espontáneas ante situaciones comunes o inusuales nos arrancan sonrisas y, en muchas ocasiones, nos ofrecen una visión de su curiosidad y su relación con el entorno que los rodea. Desde interacciones con otros animales hasta gestos cómicos, los perros nos recuerdan constantemente lo maravillosos que son.

Un reciente vídeo compartido por la cuenta de Twitter Puppies 🐶 (@PuppiesIover) muestra a un perro viviendo un momento tan inusual como hilarante. En el clip, el perrito, que se encuentra refrescándose en un río, se ve rodeado por un bivaque de mariposas. Estas delicadas criaturas parecen sentirse cómodas aterrizando sobre su cuerpo, pero para el can, esto representa un problema que intenta resolver a toda costa. Lo que sigue es una mezcla de movimientos torpes y desesperados por sacudirse a las mariposas, e incluso intenta comérselas en un par de ocasiones.

Una mariposa reposando en el hocico de un perro
Una mariposa reposando en el hocico de un perro | Canva

El episodio: un encuentro inesperado

El vídeo, que dura 41 segundos, comienza con el perro disfrutando tranquilamente en un río hasta que un grupo de mariposas comienza a rodearlo. Las mariposas no solo vuelan a su alrededor, sino que también  aterrizan sobre su lomo y su cabeza. La reacción del perro no se hace esperar: empieza a moverse de un lado a otro, sacudiéndose frenéticamente para deshacerse de las "intrusas".

En un momento, el perro incluso intenta atraparlas con su boca, logrando lo que parece ser un pequeño éxito en algún intento. La escena combina la desesperación inocente del can con la elegancia de las mariposas, creando un contraste que ha conquistado a quienes han visto el vídeo.

El comportamiento del perro tiene una explicación bastante lógica. Los perros son animales muy sensibles a los estímulos externos, especialmente a los que implican movimiento o contacto físico. La presencia de las mariposas volando a su alrededor y aterrizando sobre su cuerpo probablemente activó su instinto de defensa, haciéndole  interpretar a estas pequeñas criaturas como una posible amenaza o simplemente como algo molesto.

Además, el movimiento errático y ligero de las mariposas podría haber despertado su instinto de caza. Los perros, especialmente cuando están en un entorno natural como un río, tienden a perseguir insectos, aves u otros pequeños animales por pura curiosidad o juego. En este caso, la mezcla de molestia y diversión llevó al perro a intentar atrapar a las mariposas, aunque estas claramente no compartían su entusiasmo.