La curiosa situación que se produjo en un bar ha causado revuelo en redes sociales, luego de que una clienta dejara una crítica negativa tras un pequeño incidente. Según la clienta, pidió una infusión, pero el bar se equivocó y le trajeron una tila en lugar del rooibos que solicitó. Aunque el bar le ofreció cambiar la bebida en varias ocasiones, la clienta decidió no hacerlo y optó por tomar la tila. Sin embargo, más tarde publicó una reseña criticando el hecho de haber pagado 1€ por esa tila, lo que para ella dejó un "mal sabor de boca", ya que mencionaba que ni el bar se enriquecía con ese euro ni ella se empobrecía, pero era un detalle que no le gustó.
La respuesta del propietario del bar no se hizo esperar y fue todo un ejemplo de contundencia, amabilidad y defensa de su negocio. El dueño comenzó reconociendo que, efectivamente, hubo un error con la infusión, pero también aclaró que se le ofreció a la clienta cambiarla hasta cuatro veces, y que ella insistió en que no había problema. De hecho, detalló que la clienta pasó 45 minutos en el bar y que, al final, solo se le cobró 1€ por la infusión especial, una tarifa reducida. Sin embargo, lo que más molestó al dueño fue la reseña negativa que apareció después, considerándola como una "puñalada por la espalda", ya que pensaba que el comportamiento de su personal había sido más que correcto.
Un día más en la oficina
El tuit, compartido por la popular cuenta Soy Camarero, rápidamente se viralizó, sumando miles de interacciones y generando un debate sobre cómo las pequeñas incidencias en los bares pueden acabar en críticas que, según muchos, son injustificadas. El propietario del bar explicó que, aunque su negocio no es una ONG, intenta siempre ofrecer el mejor servicio posible, pero que situaciones como esta resultan frustrantes para quienes trabajan en hostelería.
Lo que más destacó en redes fue el tono mesurado pero firme del dueño del bar, quien, lejos de insultar o atacar, explicó detalladamente su versión de los hechos, sugiriendo que el trato a la clienta fue ejemplar. "No entiendo que nos dé una cara y después quiera un consumo gratis cuando se le insistió hasta cuatro veces en cambiarlo", añadió. La respuesta del dueño ha sido calificada por muchos usuarios como "sublime" y "perfectamente medida". Este es un simple ejemplo más de los surrealistas episodios que se viven a diario en los bares.
Así proclamaba el dueño del bar en su respuesta: "Buenas Esther, como dicen en mi pueblo, esto es una apuñalada trapera en toda regla. Hasta 4 veces le dijo el camarero que se lo cambiaba, como usted dice, le pidió disculpas, no quiso cambiar la consumición y decía que no pasaba nada. Estuvo 45 minutos usando nuestras instalaciones, la infusión que tomó era una especial y se le cobró como una infusión normal, por el error, a 1 euro, y encima nos apuñala por la espalda poniendo esta reseña. Creo que el comportamiento de la empresa fue ejemplar. Por desgracia no somos una ONG, hay que pagar sueldo, alquileres, tasas municipales de terraza, luz, agua, etc. Así que no entiendo que nos dé una cara y después quiera un consumición gratis cuando se le insistió hasta 4 veces en cambiárselo. En fin, hay gente para todo".